Educación

Clases por «webcam» ante el reto de la España vaciada

Las titulaciones que ofrecen centros como la UNED de Zamora permiten a personas residentes en los pueblos cursar un grado universitario desde casa

Victorino Merillas, uno de los alumnos que estudia desde su pueblo gracias a la UNED M. ÁLVAREZ

ALBERTO FERRERAS

16/01/2020
Actualizado a las 14:07h.

Algunos lo compatibilizan con cuidar el ganado, otros con tareas agrícolas y hay quienes lo tienen como principal cometido, pero todos ellos tienen en común que son estudiantes universitarios y a la vez habitantes del medio rural. Para ello, estos alumnos han sacrificado asistir a las aulas presenciales por vivir en los núcleos de población de Castilla y León que forman parte de la denominada España vaciada. La peculiaridad de estos universitarios es también en muchos casos su mayor escollo puesto que ser universitario rural conlleva algunos obstáculos como la batalla que muchos de ellos deben lidiar con el acceso a Internet.

En la UNED de Zamora hay matriculados este curso unos 1.600 alumnos y casi la mitad de ellos son del ámbito rural. Este centro universitario es el elegido para cursar un grado por estudiantes que residen en pueblos del sur de la provincia de León, el sureste de Valladolid y de toda la geografía provincial de Zamora y de Salamanca. Los alumnos pueden asistir a las tutorías en las dependencias que este centro asociado de la UNED tiene en Zamora, Benavente, Ciudad Rodrigo y Béjar o, si cuentan con un acceso a Internet suficientemente bueno, acceder a algunas de ellas y realizar consultas a los profesores desde casa a través de la Red.

Las nuevas tecnologías facilitan los estudios a distancia pero a la vez son el principal motivo de quebraderos de cabeza para algunos alumnos para los que no disponer de una conexión estable y a alta velocidad les supone un freno a la hora de avanzar en su currículum universitario. Ese es el caso, por ejemplo, de Patricia Melero, residente en un pueblo del alfoz de Zamora, Moraleja del Vino, y estudiante del Grado de Psicología en la UNED. Esta estudiante detalla que a su localidad no llega la fibra óptica y además hay cortes de luz intermitentes, lo que supone que después de cada uno de ellos debe reiniciarse el router y establecer de nuevo la conexión a Internet. «Eso te deja bloqueada cuando estás haciendo un trabajo», señala Patricia Melero tras indicar que su opción por la UNED se debe a que, con una niña de veinte meses, le resultaba más fácil que matricularse en la Universidad de Salamanca (USAL), donde tenía la obligación de ir a clase.

Quien sí estudia en la USAL es Ángela Hernández, que reside en la localidad de Villares de la Reina . En su caso, se desplaza a diario a la capital salmantina para asistir a la universidad. Su diferencia con otros alumnos, según explica su madre, Rosario Pozo, profesora de la USAL y de la UNED, es que tiene más problemas para establecer las relaciones de grupo universitario porque siempre está pendiente del transporte al pueblo, además de que la conexión a Internet no es tan rápida como en la ciudad.

Única residencia

También dependen de las nuevas tecnologías para comunicarse con su profesor los benaventanos Antonio y Susana, que estudian Derecho y conversan con algunos de sus profesores por webcam, ellos en el aula de la UNED en Benavente y el docente en la de Zamora. A mayor distancia de su centro universitario se encuentra Victorino Merillas, que reside en Villabrázaro, a 275 kilómetros de la sede de la Universidad a Distancia de Madrid, donde cursa Magisterio en la especialidad de Primaria. Entre las ventajas de estudiar desde su pueblo cita las de no gastar en una segunda residencia y no tener que separarse de su pareja y sus amigos de siempre, y entre las dificultades vuelve a aparecer la de la conexión a Internet.

Los problemas de acceso a internet son el principal caballo de batalla

La Red se ha convertido en una herramienta indispensable para centros como la UNED de Zamora, en el que se pueden cursar una veintena de grados universitarios y se sirve de las nuevas tecnologías para interconectar su sede principal y las que tiene en Benavente, Ciudad Rodrigo y Béjar. En los tres centros satélite tiene aulas para conectar mediante videoconferencia o a través de webconferencia con las tutorías que se imparten en Zamora. Del mismo modo, en las cuatro sedes los alumnos del último curso de grado pueden acceder a tutorías que se imparten desde otros centros del campus Noroeste de la UNED como los de La Coruña, Asturias o Mérida. Cuando se trata de webconferencias, los estudiantes pueden seguir las tutorías desde su propia casa si tienen una conexión a Internet que lo permita, pero si la tutoría se imparte a través de videoconferencia la única posibilidad es acudir a una de las cuatro sedes, según explica la secretaria adjunta de la UNED de Zamora, Carmen Alonso.

Como contraprestación a la incomodidad que puede suponer a los universitarios rurales tener que desplazarse al centro más cercano de la UNED, esa asistencia permite que el alumnado sienta más lo que es formar parte de la comunidad universitaria y meterse en el ambiente de la educación superior. En cualquier caso, uno siempre puede hacer de su pueblo su lugar de estudios universitarios excepto para examinarse, cuando sí es obligatoria la presencia en las aulas del centro asociado de la UNED.