Caso Arandina, ¿qué pasó y por qué han sido condenados los exfutbolistas a 38 años de prisión?

El fallo de la sentencia les aplica la doctrina del Supremo con La Manada que estableció que en una violación grupal cada uno de los acusados fuera responsable de los hechos realizados por él mismo y como cooperador necesario por los cometidos por los demás, y de esta manera los futbolistas son condenados a la pena más elevada impuesta de los recientes casos de agresión sexual de estas características, aunque el máximo cumplimiento de la pena de prisión se fija en 20 años, conforme a lo dispuesto en el Código Penal.

Los hechos se remontan al 24 de noviembre de 2017 , cuando la menor acudió con Carlos Cuadrado «Lucho», de 24 años; Víctor Rodríguez «Viti», de 22, y Raúl Calvo, de 19, los exjugadores condenados, a su domicilio. En un vídeo grabado por el móvil -que fue clave durante el juicio- se podía ver a víctima y agresores en ambiente distendido. La joven denunció que posteriormente a esa escena la actitud de ellos cambió y que fue obligada a mantener relaciones con todos ellos en el salón de la casa y posteriormente fue abordada por uno de ellos en el pasillo de la vivienda y llevada a un dormitorio para «soportar» ser forzada de nuevo, según relató a la Fiscalía.

Durante el juicio, celebrado a finales de noviembre, la menor ratificó los hechos denunciados y negó que hubiera caído en contradicciones. También relató que los futbolistas «si que sabían que tenía 15 años». Asimismo, según explicó el abogado de la acusación particular a las puertas de la Audiencia, la menor había explicado que se decidió a denunciar unos días más tarde de suceder los hechos porque «se ha ido poco a poco dando cuenta de lo que realmente había sucedido y ahora lo que quiere es justicia».

Durante las intensas jornadas que duró el juicio desfilaron decenas de testigos. En ellas imputados y denunciante nararron sus versiones. No obstante, un factor clave resultó el análisis tecnológico . Fue un vídeo grabado por la propia víctima en el salón de la casa el que confirmó que la menor había estado en ese lugar y que allí había cuatro jóvenes, aunque uno de ellos aseguró durante el juicio que se fue a una habitación a jugar con una videoconsola y no se enteró de nada.

También mensajes cruzados permitieron saber como parecía que se estaba planeando lo que en algún momento se llega a llamar, en uno de esos mensajes, una orgía, aunque en la vista oral los acusados aseguraron que se trataba de «bromas».

El modo en el que utilizaron el movil en el lugar de los hechos también fue considerado clave por las acusaciones, que durante el juicio vieron relevante que entre las 20 horas y las 21.30 de aquel 24 de noviembre de 2017, durante una hora y media los tres exjugadores de la Arandina acusados de agresión sexual a una adolescente esa misma tarde no utilizaron sus teléfonos móviles. Un escenario que contrastaría con la intensa actividad que sí registraron antes y después y que podría ser significativo de que en ese lapso de tiempo no hubo normalidad en la casa de los acusados, donde la joven aseguró que había sido violada.