La viruela ovina y caprina, la enfermedad que tiene en jaque al sector ganadero de Castilla-La Mancha

Por ese motivo, este tipo de viruela está incluida en la categoría A del listado de los reglamentos de la Comisión Europea, lo que implica una serie de medidas que hay que aplicar en caso de su detección. Así lo ha explicado este martes Cruz Ponce, la directora general de Agricultura y Ganadería de Castilla-La Mancha, única comunidad autónoma en España con casos de esta enfermedad en estos momentos después de los focos que se dieron en la provincia de Granada, de donde provinieron los animales que contagiaron a las cabezas de ganado en esta región.

Castilla-La Mancha cuenta con unas 6.000 explotaciones con más de 3 millones de ovejas (2,5 millones) y cabras (no llega al millón). Hasta ahora, desde el mes de septiembre, se detectaron seis focos en Villaescusa de Haro (Cuenca), donde se han sacrificado unas 29.000 cabezas de ganado, y cuatro más en los municipios conquenses de Tébar y La Alberca de Záncara, con otros 8.500 animales muertos.

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Pero esta semana se ha conocido la existencia de animales con síntomas compatibles en un cebadero de grandes dimensiones en la provincia de Ciudad Real, sin especificar dónde ha sido, algo que preocupa al Gobierno de Castilla-La Mancha al estar a una distancia considerable de los anteriores focos. La conclusión a la que han llegado es que el origen más probable de esos casos puede ser el movimiento de ganado y, por tanto, para evitar la propagación de la enfermedad, han decidido inmovilizar todos los cebaderos de la región, a excepción de los de la provincia de Guadalajara, donde la cabaña ganadera es mucho menor y con otro sistema de funcionamiento diferente.

Para ello, la Consejería de Agricultura, Agua y Desarrollo Rural ha firmado una resolución que ya es efectiva y que, según ha anunciado la directora general, será publicada este miércoles o jueves en el Diario Oficial de Castilla-La Mancha. Entre las medidas incluidas, solo se autorizarán movimientos de animales con destino a mataderos de la comunidad autónoma, siempre que hayan permanecido en la explotación de origen al menos un mes o desde su nacimiento.

Además, ha señalado que los medios de transporte tienen que estar limpios y desinfectados, y los animales no deberán presentar síntomas compatibles con la viruela en las 48 horas anteriores al traslado. Lo que sí se podrá es vender y recoger la leche en las explotaciones con esa vocación láctea. Del mismo modo, se van a analizar a todos los sementales a petición de la Asociación Nacional de Criadores de Ganado Ovino Selecto de Raza Manchega (Agrama).

En relación con ello, la Junta de Comunidades ha abonado ya en indemnizaciones una cantidad de 4 millones de euros, que se pagaron en diciembre «con la mayor agilidad posible», ha informado Ponce, que ha destacado que «esta enfermedad está afectando a un sector muy importante para la agricultura y la ganadería de Castilla-La Mancha, con una fuerte vocación exportadora y, por lo tanto, debemos dirigirnos todos con la mayor de las prudencias».

«Las medidas de carácter sanitario que se aplican en estos casos pueden ser y son, de hecho, incómodas y gravosas para los ganaderos, las administraciones y los mercados, pero son necesarias para evitar males mayores», ha manifestado. En este sentido, la directora general ha dado a conocer las decisiones que han tomado desde el Gobierno regional desde el primer momento.

En primer lugar, según ha recordado, cuando se detectaron los primeros positivos de animales, se declararon las explotaciones ganaderas afectadas como zonas de restricción, protección y vigilancia hasta los diez kilómetros a la redonda. A continuación, se sacrificaron todas las cabezas de ganado que padecían la enfermedad, siguiendo la reglamentación europea y nacional, y se inmovilizó al resto de animales.

Asimismo, se han realizado encuestas epidemiológicas en todas las granjas, se ha hecho el control de la salida de la leche, con inspecciones y unas 10.000 tomas de muestras en otros puntos cercanos a las zonas de restricción. Una labor que se va a extender durante los dos próximos meses para llegar hasta las 500 explotaciones muestreadas.

Por otro lado, la Consejería de Agricultura, Agua y Desarrollo Rural está preparando una orden dirigida a los ganaderos que vayan a recuperar la actividad, basada en un real decreto que está tramitando actualmente el Ministerio de Agricultura para compensar la diferencia del precio de las ovejas con lo recibido por la indemnización, con un máximo por explotación que aún no se sabe.

La directora general ha hecho hincapié en que «es muy importante la información y la concienciación», para lo que ha dicho que han enviada cartas a todos los titulares de las explotaciones y, además, están desarrollando un programa de jornadas informativas en todas las comarcas de Castilla-La Mancha dirigidas tanto a los veterinarios como a los ganaderos.

Para cualquier duda sobre este problema, la Consejería ha habilitado la dirección de correo electrónico sanidadanimal@jccm.es, pero también va a redactar un documento con las preguntas y respuestas más frecuentes que se publicará en breve.