Toledo amplia la oferta más allá del Casco, se alía con El Greco y busca al turista de idiomas, deporte y congresos

Toledo, ha dicho, «experimenta diálogo continuo con los visitantes y con los propios toledanos», algo que se demuestra cuando los ciudadanos «dicen que han descubierto un nuevo olor en una esquina». Razón por la que ha apostado por ir a «la experiencia personal de cada una de las personas» para conseguir un turismo personalizado.

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En este punto ha explicado su idea de, a través de una docena de rutas, diversificar los ejes turísticos de la ciudad para que «los visitantes no vayan a los mismos lugares a las mismas horas», lo que propiciará además «cuidar» a los toledanos que viven en el Casco.

Coge forma esta idea en la propuesta 'La vuelta a Toledo en 12 rutas« para que el turista »no vea sólo el A, B, C« y conozcan la ciudad más allá del extrarradio», para lo cual propone también apuntalar el valor medioambiental del río Tajo a su paso por la ciudad.

Un extrarradio para el que cuenta con dos aliados, como son Puy du Fou o ElGreco, otras de las armas para generar «un turismo de calidad que hay que seguir ampliando». «Este año volverá a ser Año Greco y tenemos que trabajar para que lo sean todos los años», ha apostado el primer edil toledano.

Como cuarta experiencia, ha hablado del espectáculo Lúmina, «referente en toda España y que no tiene ninguna otra Catedral en el mundo», conformando un espectáculo «del más alto nivel».

A ello ha sumado el inminente octavo centenario de la colocación de la primera piedra de la Catedral Primada, «que servirá para trabajar en una estrategia conjunta y aprovecharnos de la potencialidad» del monumento. También se está trabajando para ser Capital de la Cultura en 2031, algo que «ya ayuda a generar turismo de calidad».

«Ya somos candidatos oficiales para ser en 2025 Ciudad Europea del Deporte, que ayudará a generar que vengan atletas internaciones a visitarnos, otra excusa más para venir más allá del patrimonio y la cultura»; ha indicado.

También sugiere potenciar el turismo de congresos, que desestacionalizar visitantes y trae a gente que «también buscan artesanía, damasquinado o cerámica»; todo ello sin dejar de lado los reclamos gastronómicos de Toledo.

Otra de sus propuestas es colocar a Toledo como destino turístico para estudiantes que quieran aprender español, algo para lo que ya se está trabajando, también de la mano de la Universidad de Castilla-La Mancha.