Manolo Cerdán: «Necesitaba hacer algo por la cultura»

En una entrevista, Cerdán afirma que cuando decidió brindar su casa al mundo de la cultura en Talavera de la Reina , a comienzos de los años ochenta, fue «porque lo llevaba en la sangre, por una semilla que me habían sembrado» .

La Galería Cerdán lleva 35 años de actividad , pero muchos más llevan ligados a la cultura Manolo Cerdán y Sara Tornero, su esposa, tanto en Talavera de la Reina como en la cercana Arenas de San Pedro (Ávila), donde también han desarrollado una intensa labor. De hecho, Cerdán recuerda que fue en Arenas de San Pedro donde «me llegó el momento» de tomar la decisión de «organizar una serie de cosas culturales» en una gran casa que había heredado en Talavera, que está situada en la calle Puente Nuevo, y que desde entonces ha recibido a cientos de pintores, poetas y artistas.

La «semilla» cultural de Manolo la puso su padre, afirma sin duda, un guarnicionero de segunda generación que le enseñó a ver «la belleza» de trabajar el cuero. «Es la fuente de la que yo he bebido», dice. Pero también estaba a su lado Sara Tornero y amigos como Victorio Rodríguez (1930-2005), que desarrolló una intensa trayectoria cultural en Brasil antes de regresar a su localidad de nacimiento ( Arenas de San Pedro ) donde continuó trabajando e inspirándose.

A Cerdán, como a Victorio, le ha marcado profundamente este municipio abulense del Valle del Tiétar, junto a Gredos, donde estudió Bachillerato y donde no solo se formó académicamente «sino espiritual y artísticamente», afirma.

Cuando Manolo y Sara decidieron abrir la Galería, abandonaron otros negocios pese a que «yo sabía, positivamente, que esto me iba a costar esfuerzo y sudor. Pero yo creía que en esos momentos eran necesario, importante», asegura, porque en la ciudad «no había nada» en el ámbito cultural.

Su objetivo fue atraer a pintores y artistas que mostraran lo que hacían para que los talaveranos lo conocieran en un momento muy difícil al actual en cuanto a comunicaciones y difusión cultural.

Poetas como José Hierro, Rafael Morales, Leopoldo de Luis y Joaquín Benito de Lucas, pintores como Nelson Zumel y el acuarelista Juan Díaz o ceramistas como Amparo Ruiz de Luna son algunos de los cientos de artistas que han pasado por la Galería a lo largo de estos 35 años. Donde también, por ejemplo, se ha brindado el único homenaje que se ha hecho a Marcial Lafuente Estefanía (1903-1984), el autor de miles de novelas del oeste americano.

A sus 86 años, Manolo Cerdán recalca que han sido los amigos quienes le han ayudado: « la gente que te rodea es la que hace que sigas adelante en los proyectos y yo he tenido esa suerte, la de rodearme de gente que me ha ayudado muchísimo y que ha estado dispuesta, como yo, a perder».

Entre ellos, el decano de los periodistas talaveranos Enrique Ginestal (1925-2011) con quien paseaba por Talavera, contemplando sus recintos amurallados y admirando esas antiguas puertas de madera «porque nos hacía ilusión divagar quién vivía de puertas adentro y cómo», recuerda con una sonrisa.

No le importa que le consideren mecenas, pero recalca que, en su opinión, mecenas es «el que da y no recibe», no quien recibe «un sueldo brillante» por su trabajo de mecenas. Reconoce que la «ilusión» es lo que siempre le ha movido y augura que la Galería, que en 2016 fue premiada por la Real Academia de Bellas Artes y Ciencias Históricas de Toledo , seguirá «al menos, mientras yo viva».

Echando la vista atrás, admite «con humildad» que ha sido pionero en muchas cosas, por ejemplo en el premio «Cerdán de Oro» a personas comprometidas con la Galería y que este sábado, como cada 3 de febrero, alcanza su edición 28: es el galardón privado más antiguo de la provincia de Toledo . No es casual que esta entrevista con Manolo Cerdán sea un 3 febrero, fecha icónica para él ya que entrega el «Cerdán de Oro» coincidiendo con el nacimiento de su padre. Este año lo recibe el fotógrafo José Ángel González, «Peña» , colaborador de Efe.