Un hombre de 74 años mata a su hermano de 79 mientras cazaban de noche en una finca de Los Navalucillos

La Guardia Civil ya lo ha detenido como el presunto autor del homicidio, que fue trasladado al cuartel de Torrijos. «Un cúmulo de circunstancias ha llevado a un accidente», afirma a ABC apenado José Ángel Pérez, alcalde de este municipio de unos dos mil habitantes.

Juan y Marcial, vecinos de Los Navalucillos, estaban compartiendo una jornada nocturna en la finca Umbría de Los Lupes, un coto de caza mayor en la comarca de La Jara, donde los hermanos tienen una casa de labranza. Pero el drama sobrevino en el camino a la Mina del Mazo. El personal sanitario que llegó en una ambulancia de soporte sólo pudo certificar el fallecimiento del hermano mayor.

Eran cazadores expertos, acostumbrados a los horarios nocturnos y a salir los dos juntos. «Son gente de campo, muy fuerte, y no estamos hablando de gente que coge un arma hoy», describe el alcalde, quien acababa de intercambiar unas palabras con otro hermano, Alejandro. «Está destrozado, no puede mantener una conversación», afirma.

Marcial había manifestado a sus allegados que no iba a renovar la licencia de caza porque ya era mayor, según le han comentado al edil. Mientras habla de su muerte, José Ángel recuerda otro desgraciado accidente de caza que ocurrió en el pueblo en febrero de 2008, un año después de que él llegara a la Alcaldía. Un padre disparó a un venado y su hijo, de 25 años, se cruzó en la trayectoria de la bala y murió. Sucedió durante una montería en el valle de la Entidad Menor de Valdeazores, perteneciente a Los Navalucillos. Eran naturales de la localidad guadalajareña de Azuqueca de Henares. «Estaba recién llegado a la política y ver a una madre coger en brazos a su hijo te marca», reconoce José Ángel.

Lo cuenta a la misma hora, aproximadamente, que un hombre de 70 años resulta herido en otro extremo de Castilla-La Mancha, a 270 kilómetros. El rebote de una bala le ha alcanzado en una pierna mientras cazaba en una finca rural de Robledo de Corpes, en la provincia de Guadalajara. Es trasladado en un helicóptero medicalizado hasta el Hospital Universitario de Toledo, a 200 kilómetros.