«Tenía muchas ganas de ser docente»: Así era Nacho, el profesor de Lengua muerto al chocar contra un kamikaze

Pasaban las siete de esta mañana cuando ocurría el desgraciado suceso a unos 50 kilómetros del trabajo. Nacho, como lo conocían, viajaba con Ana Belén hacia el IES Consaburum, en Consuegra, donde los dos daban clase de Lengua y Literatura en un centro con 75 docentes y 800 alumnos.

Él conducía y la desdicha se cruzó en su camino nada más salir a la autovía, como aquel que dice. Nacho era natural y vivía en Miguelturra y Ana Belén, de Almagro aunque natal de Bolaños de Calatrava. Compartían vehículo y habían manifestado a algunos de los compañeros su miedo por la carretera. Por eso preferían circular por la autovía, ya que se sentían más seguros, en lugar de ir por la carretera nacional como hacen otros profesores. «¿Qué te parece? ¿Qué te parece?», se preguntan en su instituto. «Es increíble lo que ha sucedido», se responden disgustados.

Los dos aprobaron la oposición en 2023 y ya habían superado el curso de prácticas. Ana Belén lleva dos años en el IES Consaburum y Nacho era nuevo: llegó el 2 de septiembre porque el 1 fue domingo. «Estamos encantados con Ana Belén porque es muy trabajadora, y a Nacho no lo conocíamos tanto como profesor porque era su primer año en este instituto», relatan en el centro, que ha hecho público un comunicado en el que manifiesta sus condolencias a la familia y seres queridos.

A Nacho lo recuerdan siempre con la sonrisa en la cara: «Se le veía como una persona que transmite y con muchas ganas de ser docente y emplearse con sus alumnos. Era muy trabajador, superalegre y muy optimista».

Ana Belén, «encantadora y siempre con la sonrisa en la boca», está ingresada en la UCI del Hospital General de Ciudad Real. «Tiene muchísimas ganas de formarse y muy involucrada con los alumnos para que la convivencia sea lo más agradable posible», hablan de ella. «Y, a cualquier proyecto que salía, ella se apuntaba. Era voluntaria para todo, para todo. Una persona muy agradable».

Pero qué se les dice a sus alumnos, a los de Nacho y a los de Ana Belén, con edades entre 12 y 16 años. «Estamos destrozados, destrozados. Les hemos contado que han tenido un accidente y que, de momento, van a estar un tiempo sin verlos», explica pasadas las dos de la tarde. A los alumnos no les han comunicado que Nacho ha fallecido, pero sí lo han transmitido a las familias a través de un escrito.

Desde el centro han solicitado además a la Delegación Provincial de Educación un día de luto por la muerte inesperada de su profesor de Lengua y Literatura, que «siempre estaba con la sonrisa en la cara».