Ángel Martín, clarinetista de la Ópera de Lyon: «¡Mi vida cambió a los 8 años con la película 'Solo en casa'!»

-Hoy es el Día Mundial del Clarinete. Si le digo Johann Christoph Denner, ¿sabe de quién hablo? No vale mirar en Google.

-¿Qué es esto, un test? Fue el inventor del clarinete en la primera versión del instrumento, conocido como 'chalumeau'.

-¿Hace algo especial el Día Mundial del Clarinete?

-Me gusta estudiar como de costumbre. No hay mejor manera de celebrar este día que recordando por qué nos apasiona tocar este instrumento. También a veces hago publicaciones en redes sociales conmemorando este día o me grabo algún vídeo tocando, aunque esto último lo hago a diario.

-¿Por qué le dio por el clarinete?

-Comencé a los 8 años tras escucharlo por primera vez viendo la película americana 'Sólo en Casa', de Chris Columbus, que cuenta las aventuras de un niño al que sus padres dejan solo en casa por accidente durante las vacaciones navideñas. Fue tal la admiración que no dudé ni un instante en decir a mis padres que quería aprender a tocar este instrumento. Lo tenía tan decidido que, a pesar de que la escuela de música no disponía de ningún clarinete con el que pudiera familiarizarme durante un tiempo, decidí comprarlo directamente. Bueno, no yo con 8 años, sino mis padres. ¡Quién iba a decirme que mi vida cambiaría tanto al ver una simple película!

-¿Qué le ha dado el clarinete que no le daría otro instrumento musical?

-Es completo en todos los sentidos. La amplitud del registro pudiendo tocar notas tanto graves como agudas; la variedad de la dinámica musical pudiendo tocar tanto suave y fuerte, y la capacidad del instrumento de tocar tanto pasajes líricos y sencillos como otros virtuosos y rápidos. Por último, se adecua muy bien a estilos musicales diversos: la música clásica, contemporánea, el jazz...

-¿Es muy difícil aprender o con soplar y mover los dedos es suficiente?

-Lo más difícil es hacer sonarlo al comienzo, ya que los músculos de la boca no están formados cuando se empieza a aprender el instrumento. Por eso es fundamental comenzar a tocar con cañas (la lengüeta que se coloca sobre la boquilla), blandas y fáciles de hacer sonar. Por otro lado, las posiciones de los dedos no son muy complicadas, ya que hay muchas digitaciones que se parecen, a pesar de que tenemos una posición para cada nota, a diferencia de los instrumentos de viento metal. En mi opinión, no hay instrumento fácil o difícil; cada uno tiene sus dificultades. En el clarinete, me decanto por el control de la respiración y la calidad del sonido como los retos más importantes.

-Ya vive profesionalmente de ello y le ha permitido viajar...

-Mi trayectoria musical me ha permitido viajar por todo el mundo. Estudié en la Escuela Superior Reina Sofía de Madrid, más tarde en la Colburn School de Los Ángeles (E.E.U.U) y acabo de terminar un máster en Lausana (Suiza). Además, he realizado concursos internacionales en Bélgica, Suecia, Japón, Alemania, Portugal; y realizado conciertos con orquestas jóvenes y profesionales por Holanda, Italia, Omán, Austria, República Checa, Inglaterra, Luxemburgo y Polonia.

-¿Qué sintió al lograr la plaza como clarinetista principal de la Ópera de Lyon con 23 años?

-Fue una explosión de emociones muy fuerte: alegría por el éxito conseguido, satisfacción por el trabajo bien hecho, sentimiento de superación, ganas de comenzar una nueva etapa... Lamentablemente, en el mundo de la música rara vez tenemos la suerte de elegir la ciudad donde queremos trabajar. Vamos a las audiciones que nos interesan en función del nivel de la orquesta, de la vacante que se ofrece, de las condiciones económicas y un largo etcétera. Pero el hecho de acabar en una ciudad concreta se debe a que ha sido en esa audición donde hemos tenido éxito y no en otra. Antes de Lyon había hecho audiciones en Liverpool, Zürich, Madrid y Londres. Es divertido no saber dónde vas a acabar viviendo.

-¿De Lyon al cielo?

-Aunque estoy muy contento en Lyon, sigo haciendo audiciones de orquesta en lugares dónde me gustaría continuar mi carrera musical. Tengo una audición en mente en la Orquesta Concertgebouw de Ámsterdam y en la Ópera Nacional de París.

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-Comparemos Francia y España en la enseñanza del arte musical.

-Tema muy extenso para contestar en un párrafo. El nivel de enseñanza de música en España goza de una buena salud en comparación con otros países europeos. El problema reside en la falta de oportunidades y de escasez de empleo en orquestas profesionales, lo que hace que muchos músicos trabajen en el extranjero.

-«Por mucho que creas que puedes trabajar, puedes trabajar más duro que eso». Lleva casi cuatro años con esta frase de Kobe Bryant en el estado de WhatsApp de tu teléfono móvil. ¿Ha pensado en cambiarla?

-Es una frase que suena mucho mejor en inglés que en español. Me gusta el significado, pues te hace trabajar en busca de la perfección, aunque esta no exista. Me ayuda a tener la motivación intrínseca de seguir trabajando, incluso sin tener un propósito en concreto como puede ser un concurso, una audición o un concierto. El propósito del trabajo es uno mismo. No sé si cambiarla por el momento. Si la sustituyo por otra, pondría la siguiente: «To get something you never had, you have to do something you never did» («para conseguir algo que nunca tuviste, tienes que hacer algo que nunca hiciste»). Es una cita del actor americano Denzel Washington.