Una veintena de pueblos de las comarcas de Talavera y Oropesa no abrirán sus piscinas

Los alcaldes de los 21 municipios entienden que es una es «una decisión muy difícil, dolorosa y que puede llegar a ser hasta impopular, pero ante todo hemos optado por la prudencia», dicen los regidores en un comunicado conjunto.

Después de valorar los pros y los contras, todos los ayuntamientos han valorado que la situación actual «no es la adecuada para abrir unas instalaciones que se utilizan principalmente de forma recreativa y que, aún cumpliendo con todas las recomendaciones que aparecen en el documento del Ministerio de Sanidad del 14 de mayo, podrían ser un foco claro de posibles contagios »

Con esta decisión pretenden seguir protegiendo en la medida de lo posible en materia de salud pública a la ciudadanía, «más si cabe con el avance en las fases de desescalada, que van a ir permitiendo paulatinamente una mayor movilidad y una posible llegada de un buen número de vecinos que sabemos están deseando volver a disfrutar de su pueblo y que como siempre serán bienvenidos», aclaran.

Y ante la dificultad de mantener el distanciamiento, controlar la limitación de aforo tanto dentro del agua como en otras zonas de las instalaciones y cumplir las exigencias de desinfección y limpieza de las distintas áreas, resulta muy complejo garantizar las medidas de seguridad requeridas, argumentan los alcaldes, que realizan un llamamiento, tanto a los vecinos que han pasado el confinamiento en los 21 pueblos y que en su mayoría han cumplido las normas de manera ejemplar, como a los posibles vecinos que vayan a llegar en fechas próximas, «que por el bien de todos cumplan las obligaciones y recomendaciones que se nos están haciendo llegar desde las autoridades competentes, para reducir al máximo el peligro de posibles contagios»

«Tenemos que concienciarnos que hasta que no haya una vacuna contra el virus o hasta que no se creen medicamentos que puedan combatirlo de manera efectiva, es muy importante que todas las personas extrememos las precauciones, especialmente con nuestros mayores y personas enfermas, que son los colectivos más vulnerables frente a esta enfermedad. Hay que seguir con la guardia alta contra el Covid-19, ya que todavía hay muchas incógnitas acerca de todo lo que rodea a este virus», concluyen.