Una Escuela Taller para proteger y conservar el Damasquinado de Toledo
El alcalde de Toledo, Carlos Velázquez, se ha comprometido con la Fundación de Damasquinado a crear un centro para futuros maestros artesanos de este oficio, esencia de la ciudad de Toledo
El damasquinado de Toledo. Por su declaración como Bien de Interés Cultural
Carlos Velázquez con el presidente de la Fundación, Mariano San Félix; el vicepresidente, José María González Cabezas; el secretario, Fernando del Alisal y María López Linares, miembro del comité directivo
Juan Pulido, un joven artesano damasquinador y diseñador gráfico, dice que es incomprensible que en Toledo, una ciudad que vive del turismo y por lo tanto de una de sus artesanías mas típicas como es el Damasquinado, «no exista la posibilidad de aprender este ... oficio». Así lo afirma en un destacado de la página web de la Fundación Damasquinado de Toledo, la asociación creada hace algo más de tres años para investigar, conservar y difundir, a través de todos los medios a su alcance, las técnicas tradicionales que han hecho famosa en el mundo esta artesanía milenaria.
Estos son los objetivos con los que trabajan los miembros de esta institución y los que plantearon esta semana pasada al alcalde de Toledo, Carlos Velázquez, que mantuvo con ellos un encuentro en el Ayuntamiento al que asistieron el presidente de la Fundación, Mariano San Félix; el vicepresidente, José María González Cabezas; el secretario, Fernando del Alisal y María López Linares, miembro del comité directivo. En el encuentro, compartieron con el alcalde los diferentes proyectos que persiguen para defender el arte milenario del damasquinado toledanoy evitar que muera.
De la reunión salió un compromiso firme del alcalde para impulsar la formación del damasquinado a través de la Escuela Taller del Ayuntamiento de Toledo, con carácter permanente, uno de los sueños de la Fundación que llevan meses buscando la colaboración de las diferentes administraciones, tanto la autonómica como la provincial, para conseguir financiar este proyecto, al igual que el de conseguir una exposición permanente en la ciudad.
La idea del Ayuntamiento es recuperar el centro de formación que, en su día existió en la Diputación y en el que ejerció de maestro del Taller de Damasquinado el propio Mariano San Félix, impulsor de esta Fundación que quiere también acercar este oficio a la juventud porque, como dice Raquel Pulido, otra joven artesana damasquinadora: «Es hora de modernizarlo y darle un aspecto mas atractivo de cara a un público mas joven, puesto que hasta la fecha, al hablar de damasquinado la mayoría de las personas lo ven como algo anticuado y no ven las infinitas posibilidades que este ofrece».
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