Radiografía de las federaciones deportivas de Castilla-La Mancha
Tienen la obligación de elecciones cada cuatro años, pero apenas se celebran por falta de candidatos. Hay presidentes que llevan más de 20 años en el cargo. Su presupuesto es limitado y el personal que trabaja en ellas es escaso
En Castilla-La Mancha hay registradas 41 federaciones deportivas. Desde las más tradicionales a otras menos conocidas, como pueden ser la colombicultura, la espeleología o los galgos. Gracias a la Ley de Transparencia , todas están obligadas a revelar multitud de datos. Sin embargo, la sensación generalizada es que son cotos cerrados llenos de oscurantismo.
ABC ha hecho un muestreo con nueve de ellas para conocer cuál es su realidad y tratar de responder a varias preguntas. Por ejemplo,¿es verdad que los presidentes se perpetuan en el poder? ¿Qué presupuesto manejan? ¿Cuánta gente trabaja en ellas?
Como pasa con cualquier gobierno en España, las federaciones tienen que celebrar elecciones cada cuatro años. Estas coinciden con los Juegos Olímpicos, por lo que les toca en 2020. Así es la teoría. La práctica es que es infrecuente que haya urnas porque, normalmente, solo se presenta un candidato. Que suele ser el presidente.
Esto explica que Enrique Corcuera lleve 22 años al frente de la federación regional de balonmano . O que Vicente Alumbreras y Cruz Rodríguez acumulen 15 en las de ciclismo y voleibol. O que Olallo Fernández y Enrique Campillo sumen 11 en las de atletismo y tenis. Consultados por este periódico, los presidentes se dividen entre los que aseguran que «alguna vez» han tenido rival y los que reconocen que no lo recuerdan.
A veces, el cambio al frente de una federación se produce de la noche al día. Hace unos meses dimitió «por motivos personales» José María Orozco, dirigente del golf desde 2004, y le sustituyó el que era vicepresidente, Carlos Gutiérrez, que adelanta que se presentará a las elecciones del próximo año.
En la de baloncesto, Ramón Granados estuvo ocho años (2008-2016) y al salir la federación le puso una querella criminal «por la apropiación indebida de al menos 200.000 euros» . Le acusaban de una «pésima gestión», de dejar una deuda de un millón y de utilizar la federación «en su propio beneficio y para los negocios que ha montado durante su mandato».
A su sucesor, José Luis Rodrigo, no le fue mucho mejor. En agosto de 2018 le obligaron a dimitir por «irregularidades en su gestión personal» y ahora está al mando el que era vicepresidente, José Esteban Gálvez. El año pasado el presupuesto de la federación fue de unos 750.000 euros, de los cuales casi 127.000 se dedicaron a pagar la deuda con los árbitros.
Al margen de la de fútbol, las cuentas en las ocho federaciones analizadas por este periódico oscilan entre los 750.000 euros de la de baloncesto y los poco más de 80.000 de la de balonmano. El meollo del dinero sale de las subvenciones públicas y de las aportaciones de los deportistas con licencia. El número de estas varía entre las 5.200 del golf y las entre 800 y 1.000 del voleibol.
Lo limitado del presupuesto hace que el personal que trabaja en las federaciones regionales sea escaso y que los presidentes no cobren. En las ocho analizadas hay 25 contratos: 10 a jornada completa y 15 a tiempo parcial . Por ejemplo, la de atletismo tiene cinco trabajadores a tiempo completo y la de montaña solo una administrativa de forma parcial.
Carlos Ortega es el presidente de esta última. Llegó en 2012 y estará hasta 2020, ya que los estatutos de su federación establecen un tope de ocho años. Toda una novedad. «El año que viene vamos a tener problemas para encontrar a un candidato. Esto conlleva mucho trabajo y no tiene remuneración», explica a ABC.
El fútbol es un mundo aparte
Desde que a mediados de la década de los 80 se creó la Federación de Fútbol de Castilla-La Mancha (FFCM), esta solo ha tenido dos presidentes: Nieves Mercadillo y Antonio Escribano, al mando desde 1997. Escribano gestiona un presupuesto que se sitúa en torno a los 2,5 millones de euros, con unas 45.000 licencias (contando el fútbol sala) y 30 empleados.
A lo largo de los años, al presidente regional le han ido saliendo enemigos. Principalmente tres: Alfonso Pino Zamorano , Miguel Ángel Galán y Juan Pablo Trujillo . El primero es un exárbitro de Primera División que hace dos años denunció que en la federación castellano-manchega le pedían un cinco por ciento de lo que ganaba por partido, además de amaños en las elecciones.
Galán es el presidente del Centro Nacional de Entrenadores (Cenafe). También el artífice de que cayera Ángel María Villar después de casi 30 años al frente de la Federación Española. «En las elecciones a las federaciones no hay un sistema democrático y se hacen todo tipo de artimañas para salir elegido. Por eso llevan tanto tiempo, porque hay un sistema que lo permite», afirma. Sobre Escribano añade: «Es una persona que ha estado dentro del sistema clientelar de Villar».
Trujillo, presidente del Miguelturreño y antes del Atlético Teresiano, decidió presentarse a las elecciones en 2016. En el fútbol hay cuatro estamentos (árbitros, jugadores, entrenadores y clubes), que votan para elegir a los 70 asambleístas que finalmente deciden quién es el presidente. Son listas cerradas y, por tanto, el que gana la primera ronda se lleva todos los asambleístas. Trujillo también denuncia que «hubo una serie de artimañas, que las tengo denunciadas». Por ejemplo, con el voto por correo, que «ellos (la candidatura de Escribano) ya tenían más que amasado». En 2020, anuncia, se volverá a presentar.
Tres millones a repartir con clubes, deportistas y eventos
La Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha subvenciona el deporte en la región con 2.825.000 euros. Las ayudas se dividen en cuatro categorías: federaciones; clubes y sociedades anónimas deportivas; deportistas de élite; y eventos.
Las 41 federaciones se tienen que repartir 1.250.000 euros. Este año la de fútbol ha sido la que más dinero se ha llevado, con 62.483 euros; seguida de baloncesto, con 60.296,10;natación, con 50.712,31; y atletismo, con 49.297,25. En cambio, las federaciones con menos ayuda económicahan sido las de colombicultura, con 9.243,81 euros; automovilismo, con 9.666,49; y petanca, con 9.804,32.
Mientras, a los clubes y sociedades anónimas deportivas se les subvenciona con 1,1 millones. Este año aún no se ha publicado la resolución de la convocatoria. En 2018 los clubes que más dinero se llevaron fueron el Ciudad de Guadalajara y el Ciudad Encantada, ambos en la Liga Asobal de balonmano, que recibieron 140.000 euros cada uno. En cambio, el CD Esgrima Toledo, el Club Natación Daimiel y el CD Hansu de taekwondo se tuvieron que conformar con 1.000.
Por su parte, los deportistas de élite han visto cómo se reduce su subvención: si el año pasado les dieron un total de 380.000 euros, este año han sido 300.000. Esto ha afectado al número de beneficiarios, que se ha reducido de 170 en 2018 a 86 este año. Cinco deportistas han recibido un tope de 8.000 euros: Paco Cubelos, de piragüismo; Alberto Fernández, de tiro olímpico; Daniel Molina, de triatlón; José Luis Rodríguez, de tiro olímpico; y Sandra Sánchez, de karate. La ayuda mínima ha sido de 1.500 euros. El año pasado, la subvención tope también fue de 8.000 euros, que recibieron tres deportistas, mientras que la mínima se fijó en 700.
Por último, la Junta destina 200.000 euros a eventos deportivos organizados por clubes o federaciones. Aunque el dinero total es el mismo que el año pasado, en 2018 se subvencionaron 76 eventos y en 2019 han sido 153. En 2018 la ayuda máxima fue de 15.000 euros y la mínima de 1.000. Este año la ayuda máxima ha sido de 4.500 euros y la mínima de 500.
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