Dani González, goles que derriban barreras

Recién cumplidos los 20 años y ya asentado en el primer equipo, el canterano es una de las grandes noticias de una temporada que puede ser histórica en el 'Carlos Belmonte'. No obstante, los manchegos lideran el grupo II de Primera RFEF, por lo que ascenderán directamente a Segunda división si no pierden la ventaja en las nueve jornadas que quedan.

«Es un delantero que tiene gol», dicen en el club, donde son conscientes del diamante que poseen y en diciembre le renovaron el contrato hasta el año 2025. «Es un caso peculiar. Hizo la pretemporada con nosotros, teníamos una hoja de ruta marcada para él, pero, por circunstancias, apareció», ha comentado esta semana en Radio Marca el entrenador Rubén de la Barrera, que en las sesiones se dio cuenta de «una mayor madurez, un mayor peso y, sobre todo, una sensación de que ¡ojo! este chico quiere ser futbolista».

Aparte del Racing de Ferrol, el espigado punta (mide 1,86) también ha visto puerta contra Cornellà, Sabadell y Atlético Baleares. En total, ha marcado cuatro tantos a lo largo de 14 partidos y 705 minutos de juego . Los cuatro tuvieron de escenario el 'Belmonte'. En la plantilla manchega, el gol está siendo muy repartido: Manu Fuster lleva nueve, Rubén Martínez ocho, Jordi Sánchez seis y Kike Márquez, que llegó en el mercado de invierno, cinco.

De momento, su único lunar son las lesiones. Ya en diciembre sufrió un esguince de rodilla y ahora igual está parado por otro esguince en el tobillo, ambas articulaciones de su pierna izquierda. Sin embargo, se espera que esté listo para el tramo decisivo.

Aunque vivió parte de su infancia en Casas de Juan Núñez, un pueblo de 1.300 vecinos a 27 kilómetros de la ciudad, Dani González es de Albacete capital. Llegó al club con once años, en infantiles, y ha ido subiendo escalones al ritmo de los elegidos. Debutó con el filial en Tercera división procedente del juvenil de División de Honor en enero de 2021 y apenas ha estado unos meses antes de dar el salto con los profesionales.

En el club manchego no recuerdan un caso igual desde hace bastante tiempo. Otros canteranos que también despertaron ilusión fueron el defensa Ángel Moreno (La Roda, 1997), que se estrenó con 20 años y jugó seis partidos en Segunda división, pero ahora anda en el UD Socuéllamos, de Segunda RFEF; el centrocampista Jaime Romero (Valdeganga, 1990), que con apenas 18 años jugó 36 partidos en Segunda división en la temporada 2008-2009 y fue vendido por 1,7 millones de euros al Udinese italiano; y cómo no, Pablo Ibáñez (Madrigueras, 1981), uno de los héroes del último ascenso a Primera división en 2003, que luego sería traspasado al Atlético de Madrid y disputó el Mundial de Alemania 2006 con la selección española.