Día de San Ildefonso: la alcaldesa señala a los premiados como «referentes imprescindibles»

Las distinciones han sido para la Universidad de Castilla-La Mancha , Fernando Fernández Gaitán, Braulio Rodríguez Plaza, Juan José González y Santiago Palomero (a título póstumo), Irene Sánchez-Escribano, Lucas Búa, la panadería Brasal y Benito Pérez Galdós.

Durante su intervención, la regidora municipal destacó la identidad de Toledo como ciudad «reconocida en todos los rincones del planeta», con unos lazos históricos, artísticos y culturales que «traspasan fronteras» y unas raíces en las que «se reconocen pueblos y civilizaciones de todo el mundo», y añadió que «Toledo vive un buen momento y lidera las ciudades de Castilla-La Mancha situándose como referente y motor económico, social y cultural de la región».

Milagros Tolón señaló también que los toledanos deben sentirse «bien orgullosos de lo que fuimos, de lo que somos y de lo que seremos» y con respecto a esto último recordó que el próximo 23 de enero de 2021 la ciudad estará a las puertas de la celebración del VIII Centenario de la muerte de Alfonso X El Sabio . «Una efeméride y conmemoración en la que ya estamos trabajando y que, a buen seguro, marcará un nuevo hito en nuestro devenir colectivo», aseguró la alcaldesa.

La Universidad de Castilla-La Mancha ha sido distinguida con la Medalla de Oro de la Ciudad siendo, desde su creación hace 38 años, «un importante revulsivo para Toledo» al facilitar que cientos de jóvenes tuvieran la oportunidad de cursar carreras universitarias en la capital regional. De la Universidad regional también destacó su contribución a la recuperación y rehabilitación de destacados inmuebles patrimoniales, como el complejo de San Pedro Mártir, el antiguo Convento Madre de Dios o el «incomparable» Campus Tecnológico de la Fábrica de Armas que «va a seguir su proceso de recuperación este mismo año con una inversión de más de 3 millones de euros destinados a la rehabilitación del Edificio de Espoletas, que albergará la Escuela de Arquitectura, y la reforma de la antigua Enfermería».

El honor de ser hijo predilecto de la ciudad ha recaído en el atleta Fernando Fernández Gaitán. «Fue un pionero que contribuyó a fomentar el atletismo en Toledo como nadie con un palmarés deportivo impresionante», señaló la alcaldesa, para recordar que durante su etapa como concejal impulsó el Patronato Deportivo Municipal.

«Fernando representa para generaciones de españoles el genio, el pundonor, el sacrificio, el esfuerzo y el tesón para no abandonar nunca una carrera», aseguró, para añadir que este nombramiento es una expresión de aplauso, reconocimiento y admiración de toda nuestra ciudad.

La alcaldesa también tuvo palabras de reconocimiento para los tres hijos adoptivos de este 2020. De Braulio Rodríguez Plaza, arzobispo de Toledo, resaltó la decisión que adoptó en 2010 para que la procesión del Corpus Christi «regresase a su tradicional fecha del primer jueves tras la Octava de Pentecostés». Para Milagros Tolón, además de los valores religiosos y litúrgicos que aquella decisión conllevaba, Rodríguez «demostró ser sensible a las peticiones y sentimientos que desde años atrás manteníamos la mayoría de toledanos». La recuperación del Corpus en Jueves, ha indicado, ha contribuido a que nuestra fiesta haya alcanzado mayor esplendor.

También glosos las figuras del sindicalista y concejal del Ayuntamiento, Juan José González, que recibió esta distinción a título póstumo, al igual que el que fuera director del Museo Sefardí, Santiago Palomero. Del primero, destacó su compromiso con la libertad, la democracia, la igualdad social y la justicia, siendo un gran defensor del dialogo para alcanzar acuerdos, tanto en las reivindicaciones labores como en la acción política.

Sobre Santiago Palomero dijo que la ciudad «le debe mucho», ya que su gestión al frente el Museo Sefardí fue ejemplar, convirtiéndolo en uno de los focos culturales más activos de la capital, al mismo tiempo que resaltó su papel como ciudadano comprometido con el devenir social, la investigación histórica y la divulgación patrimonial de Toledo.

Los atletas Irene Sánchez-Escribano y Lucas Búa han sido reconocidos como ciudadanos de honor. «Su presencia en la élite del atletismo es un orgullo para todos. Un logro alcanzado con mucho esfuerzo, trabajo, disciplina, talento personal y excelente planificación de sus entrenadores y equipos técnicos», dijo. Tras darles la enhorabuena por sus logros, les deseó suerte para los Juegos Olímpicos de Tokio, donde ambos competirán, «sabed que todos estaremos juntos a vosotros dándoos ánimos y alentándoos para que hagáis unas excelentes marcas».

En este acto institucional también se ha reconocido a la familia Brasal por el centenario que cumple su panadería, a la que la ciudad le dedicará la calle del Río Llano en el barrio de las Covachuelas, y a Benito Pérez Galdós, coincidiendo con el centenario de su fallecimiento «por su amor por Toledo», ciudad que inspiró algunas de sus obras. El paseo Virgen de Gracia estará dedicado a esta destacada figura de la literatura española.

La alcaldesa estuvo acompañada en el acto por el presidente de las Cortes, Pablo Bellido; el delegado del Gobierno, Francisco Tierraseca; la consejera de Educación, Cultura y Deportes, Rosana Rodríguez; el presidente de la Diputación, Álvaro Gutiérrez, y el concejal de Cultura y Educación, Teo García. El actor toledano Federico Aguado actuó como maestro de ceremonias.