«Gracias a las redes sociales, cada día hay más jóvenes que donan sangre»

-¿Por qué decidió hacerse donante de sangre?

-Fue en 1973. La Cátedra de la Asociación Femenina (grupo de mujeres que iba por los pueblos enseñando labores) organizó en mi pueblo, Añover de Tajo, unas clases de primeros auxilios donde surgió hacer una colecta de sangre. Yo doné y, la verdad, me motivó bastante pensar que había gente que para seguir viviendo necesitaba sangre y era necesario que unas personas la donasen. Entonces yo me encargué de hacer las colectas en Añover de Tajo y, gracias a eso, en 1975 entré a trabajar en la Hermandad de Donantes de Sangre de Toledo como administrativa y, desde hace tres años, soy la presidenta.

Echando la vista atrás, ¿podría decir que ha sido un trabajo gratificante?

-Ha sido una labor muy bonita que me ha dado algunos sinsabores cuando hemos necesitado sangre y hemos tenido problemas para conseguirla. Pero también te da muchas alegrías cuando sabes que muchas personas se salvan gracias a la generosidad de los donantes.

-¿Cómo está de salud el Banco de Sangre de Toledo?

-Siempre las reservas no están lo bien que nos gustaría. Pero cierto es que tenemos recursos para recibir sangre de una forma tan fácil como levantando el teléfono y haciendo una llamada para que nos organicen una colecta. En 2015 se han conseguido menos donaciones que en 2014, pero esto no quiere decir que hayamos tenido más adversidades, sino que las necesidades del hospital han sido menos. Todo depende de un montón de cosas y nosotros conseguimos las donaciones en función de las necesidades del hospital.

-Porque la sangre tiene fecha de caducidad...

-Sí, la sangre caduca a los 42 días. Por tanto, no es tan importante tener más, sino tener la suficiente. Este año hemos conseguido mil bolsas menos, en total unas 17.500 entre plaquetas, plasma y sangre completa. Pero es verdad que las necesidades han estado cubiertas. Por lo tanto, ¿tenemos capacidad para conseguir más sangre? Sí, ¿tenemos los suficientes donantes generosos para poder tener la reserva siempre bien? Sí.

-Entonces evoluciona favorablemente...

Sí, evoluciona bien y los jóvenes tienen gran parte de culpa, porque cada vez son más los que forman parte de la hermandad. Es importante recordar que la franja de edad para donar tiene que estar comprendida entre los 18 y los 65 años. Nosotros vamos dos veces al año al campus universitario y conseguimos entre 70 y 80 donaciones, otras dos al IES Juanelo Turriano y en el Maratón de la Caja Rural. ¡Es impresionante cómo vienen las pandillas de jóvenes! Las redes sociales funcionan muy bien para hacer llamamientos y nos facilitan la tarea. En el día a día, en las salas de extracción cada vez hay más gente joven.

-¿Tienen cubiertos todos los grupos de sangre?

-El cero negativo es el que siempre nos hace pasar más penurias, porque al paciente cero negativo solo se le puede poner ese mismo grupo y, en cambio, un AB positivo puede recibir de cualquiera

-¿Cuánta sangre hay en el banco?

-Aproximadamente, tenemos 17.500 bolsas de sangre y cada una tiene 450 centilitros.

-Traduciendo estas cifras, ¿quiere decir que, en caso de catástrofe, las necesidades estarían cubiertas?

-En principio, las necesidades de los hospitales de Toledo, sí; y en caso de que hubiera una catástrofe, acudiríamos al resto de hermandades de la región e incluso pediríamos a otros bancos.

-¿Cree que la gente pone demasiadas excusas para donar sangre?

-Hay de todo, como en botica. A veces, hay gente que dice que solo donaría si lo necesitara un familiar. Sin embargo, pensar eso es un error enorme, porque la sangre tiene que seguir un proceso antes de poder ser transfundida y no toda la sangre vale para todo el mundo. La sangre tiene que ser analizada y la donación hasta el día siguiente, como muy pronto, no estaría disponible. Si un pariente necesita la sangre urgentemente, cuando pase los controles necesarios ya sería demasiado tarde.