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Cultura

Las batallas de Ramón y Cajal

Se inaugura en el Museo del Ejército la exposición «Pinturas que libran batallas», formada por 45 obras que desde hace más de 30 años ha ido atesorando su propietario

Cospedal, con el jefe de Estado Mayor del Ejército de Tierra, Varela Salas, al fondo ANA PÉREZ HERRERA

J. A. PÉREZ

El 17 de enero de 1641 Pau Claris declaró la república de Cataluña y la aventura duró seis días. El 23 de enero, el propio Claris tuvo que someterse a Francia y nombrar conde de Barcelona al rey Luis XIII ante el acoso al que se veía sometido por las tropas del rey español Felipe IV. Aquella batalla la reflejó en un cuadro Juan de Toledo y esta obra de arte pertenece a la colección de Pedro Ramón y Cajal, que la ha cedido al Ministerio de Defensa.

La casualidad ha querido que el conjunto, formado por 45 estampas y que incluye la pintura de Juan de Toledo, se exhiba desde este viernes en el Museo del Ejército, en el alcázar toledano. La muestra lleva por título «Pinturas que libran batallas» , es gratuita y estará abierta hasta el 7 de enero de 2018.

Este jueves fue inaugurada por la ministra de Defensa, María Dolores de Cospedal , y hoy se abre al público. «La cultura es la buena educación del entendimiento», dijo Cospedal, citando al premio Nobel español Jacinto Benavente y añadió, en referencia a la exposición, que «detrás de cada batalla siempre hay causas que las explican».

Las 45 pinturas son «parte de nuestra historia» y Pedro Ramón y Cajal las ha ido «atesorando» desde hace más de 30 años para ahora tener «la generosidad de donarlas a su patria», le agradeció Cospedal.

La exposición se divide en cuatro grandes bloques: Barroco, Neoclasicismo, siglo XIX y actualidad. Aportan «variedad» y son «una ocasión extraordinaria para enriquecer la imagen de esta institución», concedió el director del Museo del Ejército, Antonio Rajo. Mientras, el coleccionista tiene el «deseo final» de que sus obras acaben en Jaca (Huesca), su lugar de nacimiento. «Haremos lo que podamos», le prometió Cospedal.

Además del cuadro de Juan de Toledo, dos más sobresalen para Ramón y Cajal. Uno es de Augusto Ferrer-Dalmau sobre la batalla de Pavía, en la que los arcabuceros españoles masacraron la caballería francesa, la más letal de Europa en aquellos momentos, primera mitad del siglo XVI. Y el segundo es un boceto de Juan Gálvez, compuesto en 1808, pocos días después de que acabara el sitio de Zaragoza, también con los franceses como protagonistas.

Seguridad y libertad

Cospedal aprovechó el acto de inauguración de la exposición para defender el papel clave que el Ejército tiene en nuestra sociedad. «Sin seguridad, no hay libertad posible», manifestó la ministra de Defensa. Con el contexto de la situación de Cataluña siempre presente, Cospedal dijo que «sin seguridad efectiva, las pensiones, las escuelas, los centros de salud o las carreteras no serían posibles».

Además, cree que la seguridad es «un servicio público esencial del Estado» y que el Estado «es el que tiene, y el que ha de tener, el monopolio de la fuerza», cuya «obligación» es utilizarla «fundamentalmente para defender la libertad» de sus ciudadanos.

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