El arzobispo agradece al Cabildo de la Catedral de Toledo su mesura en el Corpus Christi

Es la procesión desconocida de la Semana Grande de Toledo. El 'Corpus chico' o 'Corpus del Cabildo' se ha celebrado esta tarde en la Catedral tras el rezo de las segundas vísperas, presidido por el arzobispo, Francisco Cerro Chaves.

Tras la homilía, el prelado ha tenido palabras de agradecimiento para el Cabildo de la Catedral Primada por la mesura, ha dicho, en la organización de la procesión del Corpus Christi del pasado jueves, un reconocimiento público de monseñor que viene a calmar los ánimos en la Seo Metropolitana tras las críticas que circulan en redes sociales y en determinados corrillos toledanos por lo que para algunos fue una nefasta coordinación de la procesión eucarística más importante de la ciudad.

Con este gesto sanador, el arzobispo demuestra que pisa la calle y presta atención a cuanto acontece más allá de Palacio. Acertadas o no, las críticas, siempre que sean constructivas, deben ser bien recibidas.

Dos filas de fieles con velas han precedido a Jesús sacramentado en la custodia de Enrique de Arfe. Tras ellos, representantes de los capítulos y de las hermandades han dado paso a los canónigos del templo primado. En la presidencia, además del arzobispo, han estado el obispo auxiliar, Francisco César García Magán, y los eméritos de Albacete, Ángel Fernández, y de Segovia, Ángel Rubio.

La procesión ha transcurrido con la solemnidad que impregnan las naves catedralicias a cuantos actos se desarrollan en su interior. El paso de la custodia por la girola con el Transparente como testigo, o la parada del Santísimo frente a la patrona popular, la Virgen del Sagrario, han sido dos de los momentos más emotivos.