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Fernando del Rey Reguillo - ARTES&LETRAS

Un trabajo modélico sobre la Guerra Civil en Ciudad Real, del historiador Francisco Alía

La Biblioteca de Autores Manchegos reedita, corregido y aumentado, este trabajo publicado con gran éxito hace 23 años

Fuerzas de la columna del sindicto ferroviario, con armamento y coches cogidos a los Nacionales en una intervención por tierras manchegas ARTÍN SANTOS YUBERO (Archivo ABC)

Por FERNANDO DEL REY REGUILLO

(Francisco Alía Miranda: La Guerra Civil en Ciudad Real. Conflicto y revolución en una provincia de la retaguardia republicana, 1936-1939, Ciudad Real, Diputación Provincial, Biblioteca de Autores Manchegos , 2017, 567 pp. )

La Diputación Provincial de Ciudad Real ha tenido el enorme acierto de reeditar la historia de la guerra civil en la citada provincia escrita por Francisco Alía Miranda y publicada hace 23 años, fruto de su tesis doctoral. Este libro alcanzó en su día un número de ventas realmente excepcional para un libro de historia —en torno a los 5.000 ejemplares— y para un libro, por añadidura, impulsado por una editorial institucional. Ello da idea de la calidad del trabajo que tenemos delante, así como de la facilidad de su autor para llegar al gran público, algo, por desgracia, no muy frecuente entre los historiadores profesionales, que en su mayoría se han dejado pisar el terreno por polemistas o divulgadores no siempre rigurosos.

En puridad, estamos hablando de otro libro porque la nueva edición, tal es la reelaboración a la que se ha visto sometida por su autor con la incorporación de nuevas fuentes y las enseñanzas extraídas de otras publicaciones aparecidas en este lapso de tiempo, constituye una puesta al día sumamente rica. Con el añadido de que ahora incorpora unos materiales gráficos y una profusión de ilustraciones muy atractivos que en la primera versión no se incluyeron. Todo el libro en su conjunto, además, se amolda a un formato de lujo que da idea del buen hacer desplegado por los editores.

A lo largo de los últimos treinta años, la producción de Francisco Alía Miranda , que ha demostrado ser un historiador tan riguroso como trabajador, se ha centrado en dos campos en apariencia tan alejados como la Teoría y la Metodología de la Historia , por un lado, y la Guerra Civil , por otro. Y digo en apariencia porque en realidad resultan ámbitos absolutamente complementarios, en tanto que si nuestro autor es un excelente conocedor del período más crucial en la historia de España del siglo XX ello tiene que ver mucho con su dominio de los fundamentos técnicos, metodológicos y conceptuales de los que debiera hacer gala todo investigador, pero que no siempre es así. Por otra parte, Alía también ha hecho sus pinitos en otra dimensión historiográfica no precisamente sencilla de abordar, como es el de la biografía, con el estudio que dedicó a su paisano Francisco Aguilera y Egea, el famoso general liberal que se opuso a la dictadura de Primo de Rivera ( Duelo de sables , Biblioteca Nueva, 2006). En lo que hace al conflicto bélico, sus obras sobre la trama golpista que llevó a la guerra civil ( Julio de 1936. Conspiración y alzamiento contra la Segunda República , Crítica, 2011) y la que dedicó a su final ( La agonía de la República , Crítica, 2015) han tenido un reconocimiento igualmente sobresaliente entre los especialistas.

Estamos, por tanto, ante un historiador serio y de altura que, además, escribe muy bien, de forma clara, precisa y sin ninguna concesión a barroquismo alguno. Mucho menos a las jergas culturalistas y deconstructivistas últimamente tan en boga. Alía reivindica la historia política y social de factura empírica y con sólidos apoyos documentales, en las que se formó a la sombra del magisterio humanista de otro gran historiador manchego, Manuel Espadas Burgos. Por ello, en sus textos, y por supuesto en el libro que se comenta, toda afirmación se sostiene en infinidad de fuentes tratadas con la pulcritud y el desapasionamiento característicos de los mejores historiadores.

Tales rasgos se hacen aún más necesarios cuando uno se adentra por un terreno tan delicado, espinoso y controvertido como el de la guerra de 1936, donde, aunque parezca mentira después de cuarenta años de convivencia democrática, todavía sobra el acaloramiento, las controversias y las disputas ideológicas. No ya en muchos ciudadanos de a pie, instigados por los políticos y publicistas de turno, que por desgracia no faltan y que buscan hacer de aquella historia un arma de combate, sino también entre algunos historiadores, por suerte cada vez menos. Lejos de tales actitudes, Francisco Alía no pone su pluma al servicio de ninguna causa ni se deja seducir por los cantos de sirena de la Memoria Histórica. Alía analiza el pasado con distancia para intentar conocerlo, comprenderlo y explicarlo, en modo alguno para hacer de juez. Cumple en definitiva con los rigores y exigencias de su oficio.

Pionero de la mejor historiografía académica manchega , en esta nueva aproximación a la guerra civil en su tierra, aunque con modestia no por ello renuncia nuestro autor a ser ambicioso en el mejor sentido del término. Porque su abordaje del conflicto se realiza desde los parámetros de una visión globalizadora que no deja ningún aspecto por tocar relacionado con tan compleja y enrevesada coyuntura: los antecedentes lejanos e inmediatos de la guerra; la conspiración golpista en la provincia; su aportación al esfuerzo de guerra desde la retaguardia; la vida política, sus tensiones y conflictos; el proceso revolucionario, con particular atención a la colectivización de la economía en toda su problemática; el doloroso y estremecedor asunto de la represión y la violencia; la vida cotidiana en sus variados planos (hábitos existenciales, refugiados, abastecimiento…); las actividades de la «Quinta Columna»; la sublevación de Casado… todo ello acompañado de unos interesantes y necesarios anexos. Como interesante y de agradecer resulta el capítulo final dedicado a los primeros años de la sombría posguerra, con su corolario de hambre, represión y lucha por la supervivencia.

En definitiva, cabe reiterar que la reedición, corregida y aumentada, de este libro, hasta convertirlo en una obra prácticamente nueva, ha sido todo un acierto, porque desde la perspectiva de todos los aspectos mencionados constituye un trabajo modélico.

(Fernando del Rey Reguillo es catedrático Universidad Complutense)

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