La esperada crisis de Gobierno se queda en la destitución de seis directores generales

Así lo acordó el Consejo de Gobierno de ayer, que dio el visto bueno a la destitución de seis directores generales. Según indicó Barreda, al ser preguntado por un posible cambio en su gobierno, no habrá renovación de consejeros, pero sí se han reestructurado algunas direcciones generales para dar «más dinamismo y más actividad» a estas áreas.

En concreto, se ha nombrado a Gema de Cabo Serrano, como directora general de Vivienda, en sustitución de Rosa Jiménez Tornero. A Hugo Muñoz Claver, como director general de la Familia, en sustitución de Matías Segundo Nieto. Además, se aprobó el nombramiento de Víctor Manuel Gómez López, como delegado provincial de Salud y Bienestar Social en Toledo, en sustitución de Muñoz.

Ignacio Felpeto Santero, hasta ahora director adjunto de la Oficina de Castilla-La Mancha en Bruselas pasa a ser director general de Promoción Empresarial y Comercio, en sustitución de Emilia Millán Arnedo. Margarita Rodríguez Prada, será la directora de la Oficina de Castilla-La Mancha en Bruselas.

Carlos José Blázquez Orodea es el nuevo director general de Evaluación Ambiental, en sustitución de Mariano Martínez Cepa. Por último, se aprobaron los ceses de Rafael Ariza Fernández, como director general para la Sociedad de la Información y las Telecomunicaciones; y de Ana Terol Palencia, como directora del Organismo Autónomo Espacios Naturales.

Por su parte, el PP considera que los cambios en estas siete direcciones generales del Ejecutivo de Barreda hay «una marejada de fondo muy grande», en relación con las licencias de la TDT, un hecho que el secretario regional del PP, Tirado calificó de «escándalo».

Barreda y CCM

Por otro lado, el presidente regional se refirió ayer a Caja Castilla-La Mancha y a las últimas informaciones que se han publicado sobre el interés de algunas cajas por la entidad castellano-manchega. Barreda dijo que no le extrañaba que haya «pretendientes» porque «su saneamiento va muy bien». Para Barreda, lo importante es que se cumplan tres premisas: que siga cumpliendo con la región y con la financiación de «nuestros empresarios», que repercuta en el conjunto de la sociedad los beneficios de su Obra Social, y que se garanticen los puestos de trabajo de sus empleados. «Si se cumplen estos tres requisitos, habremos hecho una buena operación».