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CULTURA

Un Cigarral con voz humana

Gregorio Marañón Bertrán de Lis publica «Memorias del Cigarral 1552-2015», un documentado relato histórico y a la vez sentimental de la casa que habitó su abuelo, el famoso médico y humanista

Casi cinco siglos en el Cigarral de Menores, con vistas a Toledo, que en el siglo XX fue importante foco intelectual y artístico

María José Muñoz

Tumbado en el suelo y haciendo grandes aspavientos, Federico García Lorca gritaba, dentro del Cigarral: «¡Muera Unamuno, muera Unamuno!» . Minutos antes, harto de escuchar al filósofo leer su «San Manuel Bueno Mártir» en la plazuela de delante de la casa, el poeta pidió ... a la esposa de Gregorio Marañón que le acompañara dentro, con la excusa de hacer una llamada telefónica. La mujer le calmó y se reincorporaron al grupo. Afuera, bajo los olmos y junto a la fuente, el escritor proseguía su empeño, insensible a los gestos de agotamiento de sus oyentes. Cuando por fin terminó, Federico se lanzó vestido al estanque de la fuente , liberando la pesadumbre de todos con aquella improvisada payasada, mientras Unamuno se mantenía imperturbable y ajeno al baño del poeta..

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