Núñez y Page enfrentan sus políticas fiscales en las Cortes de Castilla-La Mancha

Así lo señaló el consejero de Hacienda, Administraciones Públicas y Transformación Digital, Juan Alfonso Ruiz Molina, en su comparecencia tras considerar que la propuesta de los 'populares' «carece de credibilidad fiscal y falta de transparencia», ya que esconde a los ciudadanos las «consecuencias de sus propuestas y, cuando tienen ocasión, suben los impuestos».

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El presidente del PP de Castilla-La Mancha señala que el barón castellanomanchego tiene la responsabilidad y la obligación de parar que España siga siendo «el hazmerreír de medio mundo»

Unas declaraciones que llegaban minutos después de que el presidente del Partido Popular de Castilla-La Mancha, Paco Núñez, defendiera que su política pretende que los castellanomanchegos tengan «más dinero en el bolsillo y menos dinero en manos de las administraciones».

En su intervención, aseguró que su objetivo es «mejorar la vida de la gente y solucionar sus problemas» para ello, matizó que existen «dos formar de gobernar, la de quien piensa en sí mismo», como que es el caso de Emiliano García-Page y «la de quien piensa en el futuro de sus paisanos» que es la del Partido Popular.

Entre las medidas presentadas por Núñez destacan la bajada del tramo autonómico de la Renta, «algo que ya han desarrollado 12 comunidades autónomas gobernadas por el PP, incluso Cataluña, gobernada por el PSOE»; la eliminar el impuesto de sucesiones y donaciones, ya que Castilla-La Mancha continúa «cobrando el impuesto a la muerte».

Además abogó por reducir el impuesto de actos jurídicos documentados o el impuesto de transmisiones patrimoniales. Así como una bajada de impuestos a la compra-venta de suelo industrial, eliminar tasas del día a día o ampliar el grado en el que se puede suceder una empresa familiar.

Una bateria de propuestas con las que el consejero ironizó «ya viene el tio Paco con las rebajas». «Sabe que se lo digo con cariño», puntualizó, recordándole que cuando el PP gobernó en la región en 2011, lo primero que hizo fue «todo lo contrario a lo que propuso: recortes e incrementar impuestos».

Lamentó que este «populismo fiscal» perjudicaría «doblemente» a quienes menos tienen, por dos motivos: no se beneficiarían de las rebajas fiscales porque no están pensadas para ellos y porque se verían perjudicados por el deterioro de los servicios públicos.

Estas rebajas fiscales, afirmó, solo están pensadas para beneficiar, únicamente, a quienes más capacidad económica manifiestan y, supondrían «una importante merma» de ingresos públicos para la administración regional de más de 300 millones de euros.

Por su parte, la portavoz de Economía y Presupuestos del Grupo Socialista en las Cortes, Silvia FernándezAdemás, destacó el «compromiso» adquirido por el presidente Page y las deducciones fiscales enfocadas a una política tributaria atendiendo a los sectores de población con menor capacidad económica.

También recordó que el Ejecutivo regional ha congelado los impuestos y trabaja por impulsar la actividad económica y el empleo y por reforzar el blindaje del estado del bienestar.

Por último, el parlamentario de Vox, Francisco José Cobo, arremetió tanto contra el PSOE como contra el PP, acusándoles de aumentar durante sus años al frente de la Administración regional su deuda pública, que supera los 16.000 millones de euros. Asimismo, aseguró que «lo que hay que reducir es «el gasto en políticos», asegurando que la comunidad autónoma está «en quiebra técnica».