Según señala en nota de prensa la formación política animalista y medioambiental, la situación encontrada en la inspección por parte de la Guardia Civil revela un «trato inhumano» hacia los animales, quienes han perecido previsiblemente por la ausencia de agua, comida, cuidados básicos durante meses y una importante demora en la intervención por parte de las autoridades a pesar de las múltiples quejas y avisos por el estado de los animales.
Según indica, esta negligencia plantea, además, un grave riesgo sanitario al no haber pasado los animales los controles veterinarios obligatorios, lo que podría propiciar la propagación de enfermedades.
Se prevé que las cabras y ovejas supervivientes, que lo son por haber sido alimentadas por personas voluntarias, puedan ser trasladadas tras su correspondiente saneamiento.
«Desde PACMA consideramos inaceptable la situación y nos comprometemos a seguir de cerca el desarrollo del caso personándonos en el proceso legal para garantizar que se haga justicia y se impongan las sanciones correspondientes a los responsables«, declaran.
El Partido Animalista agradece «profundamente» la implicación de las personas voluntarias, que considera «clave» para la supervivencia de estos animales, y pide una «investigación exhaustiva» y la aplicación de la legislación vigente en materia de protección animal. Sin embargo, lamentan que estos animales, considerados «de producción», no estén amparados por la nueva ley estatal.
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