Un médico resulta herido tras una agresión con arma blanca en una residencia de mayores de Villarrobledo (Albacete)

CESM-CLM ha condenado la agresión «con absoluta firmeza» y ha expresado «toda nuestra solidaridad, cercanía y apoyo al médico herido y a sus familiares». Sin embargo, el sindicato advierte que episodios como el ocurrido en Villarrobledo reflejan una tendencia creciente en la región.

Según el sindicato, las agresiones a médicos y facultativos «se están multiplicando en Castilla-La Mancha, tanto en centros sanitarios como en residencias y otros centros asistenciales». Para CESM-CLM, este nuevo ataque «confirma que la violencia contra los profesionales no es un hecho aislado, sino un problema estructural derivado de años de falta de protección, escasez de recursos y ausencia de medidas efectivas».

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El plan contempla la consideración del personal facultativo como autoridad, las instalación de cámaras en las instalaciones comunes y de botones de pánico en las consultas. Además se creará la figura del director de Seguridad del Sescam

Ante esta situación, reclama medidas «urgentes e inmediatas», entre ellas el «refuerzo de la seguridad en todos los centros sanitarios y sociosanitarios», la implantación de «protocolos de prevención y actuación claros, actualizados y de cumplimiento obligatorio», así como «tolerancia cero ante cualquier agresión, con apoyo jurídico y psicológico garantizado».

El sindicato también exige una «coordinación efectiva entre Sanidad, Asuntos Sociales y Fuerzas de Seguridad en centros con residentes de especial complejidad», con el objetivo de prevenir episodios violentos como el registrado este viernes.

CESM-CLM concluye que «trabajar con miedo no puede seguir siendo la realidad de los médicos en Castilla-La Mancha. Cada agresión es un fracaso del sistema y una advertencia ignorada.»