Horche enciende de nuevo las hogueras, una tradición de cuatro siglos

«Pocas costumbres tienen más arraigo en nuestra localidad que las Hogueras de la Purísima«, explica el alcalde, Juan Manuel Moral, añadiendo: »Es la noche en la que toda la gente de Horche nos echamos a la calle para compartir, entre nosotros y también con las personas que nos visitan. Porque todos los días del año son buenos para visitarnos, pero, si solamente puedes elegir uno, sin duda la noche de las hogueras es el mejor momento«.

Se cree que los horchanos celebran esta tradición desde 1630, hace casi cuatro siglos, cuando en el pueblo se construyó una capilla en honor a la Inmaculada Concepción de María. Más tarde, en 1670, se fundó la Cofradía de la Esclavitud de la Purísima, que en sus normas ya recogía «encender luminarias la víspera de la fiesta de la toda hermosa», así como su organización, ya que son doce «esclavos» los que encienden los fuegos, siendo el más grande el del «esclavo mayor».

La Hermandad de la Inmaculada Concepción, que tuvo a don Pedro Ibero Eraso como primer Hermano Mayor, continua estando constituida por doce hermanos. El cargo pasa de forma hereditaria de padres a hijos, aunque es una decisión que debe ser sometida a votación secreta por parte de los hermanos.

Las hogueras se encienden enfrente de la casa de cada uno de esos hermanos, como símbolo de las doce estrellas que rodean la corona de la imagen de la Inmaculada Concepción. Mientras, centenares de vecinos se van desplazando de una a otra al olor de las sardinas que se asan alrededor, saltando sobre las llamas al grito de 'Viva la Purísima', purificando cuerpo y alma, limpiando los pecados y siendo bendecidos para poder compartir con sus familiares y amigos una Navidad más.

También según manda la tradición, los doce hermanos deben estar presentes cuando la noche se hace día y Horche, ya el 8 de diciembre, se cita en la Santa Misa que se desarrolla en la iglesia de Nuestra Señora de la Asunción.