Castilla-La Mancha es la región con mayor tasa de pobreza energética del país

El trabajo elaborado por Elisenda Jové-Llopis y Elisa Trujillo-Baute deja en muy mal lugar a la región castellano-manchega, y es que el 17% de los hogares de Castilla-La Mancha que se encuentran en un estado de pobreza energética tiene a su sustentador principal en situación de desempleo. Más del doble de los hogares que se encuentran en la situación contraria, un 8,8%.

Castilla-La Mancha duplicó la tasa media nacional que, en el estudio, se encontraba en un 8,3% y quedó a años luz de otras comunidades como las Islas Canarias, País Vasco o Asturias que se encontraban en las posiciones privilegiadas con 6% o menos de tasa de pobreza energética. La comunidad autónoma que sigue a Castilla-La Mancha es la otra Castilla, Castilla y León, que alcanza el 12,8%.

La dificultad para afrontar las facturas se presenta como una vía más de la pobreza que, en este caso, se sitúa en España. Las familias castellano-manchegas ingresan anualmente de media 19.750€. Dos de cada tres hogares de la región se encuentran en una situación de pobreza energética (64,9%), están en edificios con más de 25 años de antigüedad y, además, suelen ser familias unipersonales (31,6%).

La situación de desempleo del sustentador de la familia, es el factor más determinante para la situación de pobreza energética que asumen estos hogares, aunque otros datos de interés pueden ser la carencia de estudios superiores que atesoran este tipo de personas que se encuentran en ese alto porcentaje de pobreza.

En consonancia a la investigación, se puede desarrollar un perfil ficticio de los hogares que se encuentran en situación de pobreza energética. Son personas ubicadas en zonas rurales o con poca densidad de población, están pagando alquiler, en edificios con unantigüedad de más de 25 años, en zonas donde hay situaciones extremas de calor o frío y sustentados, en mayor medida, por mujeres.

La situación de pobreza energética mostrada por Naturgy muestra una situación preocupante de Castilla-La Mancha que quizá tenga que ver con la gran cantidad de zonas rurales y de poca densidad de población que hay en este territorio, y que pueden contribuir a que el 17,4% de los hogares de la región se encuentren en esta posición tan alarmante.