El Rey en Perú: «Juntos somos más y somos mejores»

En la segunda jornada de la visita de Estado a Perú, el Rey ha destacado los «grandes avances» logrados por la economía peruana, que crece un promedio del 6 por ciento anual desde hace veinte años, y ha resaltado la contribución de España a ese desarrollo. Y es que España es el primer inversor extranjero en este país andino .

«La empresa española, con su compromiso de permanencia, ha podid o contribuir positivamente a la modernización y prosperidad de Perú a través de la creación de empleo, la generación de mayor actividad económica, la transferencia de tecnología y conocimiento, y el mantenimiento de elevados niveles de responsabilidad social corporativa», ha afirmado el Rey, y «las empresas peruanas han encontrado en el mercado español un importante destino de sus exportaciones hacia Europa». Además, añadió que éstas «están llamadas a expandirse a medio plazo», por el efecto beneficioso del Tratado de Libre Comercio entre el Perú y la Unión Europea firmado en 2013.

En la inauguración del foro también ha intervenido el ministro de Asuntos Exteriores, Josep Borrell , quien ha valorado los intercambios alcanzados por España y Perú en unos momentos en los que «los vientos soplan en contra del comercio internacional» y se propugna «la vuelta al proteccionismo». Borrell ha advertido de que « estamos regresando a los peligrosos años treinta , que se saldaron con una guerra mundial, el final del multilateralismo y el deseo de revancha de los nacionalismos». Ahora, además de ponerse en cuestión el multilateralismo, «aparecen con fuerza nuevos desafíos globales», como el cambio climático, el crimen organizado, los movimientos humanos… Por todo ello, ha afirmado, «debemos alegrarnos de estar protagonizando una relación profunda» entre España y Perú.

El ministro ha felicitado a Perú «por estos veinte años de crecimiento ininterrumpido», y ha lamentado que España no haya podido cumplir este reto, por la crisis económica, pero ha celebrado que estos 40 años que han transcurrido desde que entró en vigor la Constitución han sido « los mejores años de nuestra historia moderna desde la batalla de Trafalgar (1805)».

En el encuentro empresarial, Don Felipe ha explicado que España y Perú son «socios privilegiados en una relación mutuamente beneficiosa que abarca tanto lo económico como lo político» y que esta relación, con « un horizonte temporal muy amplio », trasciende los ciclos económicos. En este sentido, Don Felipe ha destacado el papel que han desempeñado las empresas españolas en «la transformación económica» que ha vivido el Perú en todos los órdenes. «El hecho de que España sea el primer inversor en el país se ha traducido también en la presencia de numerosas empresas españolas (más de 400) que operan en territorio peruano», dijo.

Perú y España, ha agregado, «se encuentran hoy entre las economías que registran las mayores tasas de crecimiento en sus respectivas zonas de influencia: Latinoamérica y Unión Europea».

Según datos del ICEX, Perú es una de las economías que mayor expansión ha experimentado en la región latinoamericana en las últimas dos décadas, con un crecimiento medio anual del PIB del 6%. Asimismo, es uno de los mercados latinoamericanos con mejor comportamiento del IPC en la última década, con una variación anual media del 3% y con un nivel de deuda pública del 25%, uno de las más bajos de América Latina.

Asimismo, Perú ofrece un marco legal favorable a la inversión extranjera: trato no discriminatorio entre inversores extranjeros y nacionales, acceso sin restricción a la mayoría de sectores económicos, libre movimiento de capitales, libre competencia y garantía de la propiedad privada.

En el encuentro, también intervino el presidente del Consejo de Ministros de Perú, César Villanueva, agradeció al Rey, en nombre del presidente de la República, la « visita histórica », y llamó a España y a Perú a crecer juntos «dentro del estricto marco constitucional» y sin dejar espacio «a las aventuras políticas». «La ilusión que tenemos de crecer juntos necesita solidez institucional, una democracia fuerte y sólida. Solo en ese marco podremos tener políticas predecibles», afirmó. Justo después anunció que Perú necesita invertir en tres años, «con urgencia», 8.000 millones de dólares, para reconstruir la infraestructura destruida por el fenómeno El Niño.