Un reportero británico en Tenerife, franco sobre las dificultades en la búsqueda de Jay Slater: «Es una tragedia»

El joven lleva desaparecido desde hace casi un mes y son muchas las hipótesis que han surgido durante estos días sobre su paradero. Su madre aseguró al medio británico 'The Manchester Evening' que había estado en un festival de música y «presuponía que habría consumido alcohol».

La última persona en tener información sobre él fue su amiga Lucy. Minutos antes de quedarse sin batería en el móvil, Jay le avisó de que no había podido coger el autobús. Además, le dijo que se encontraba caminando sin rumbo y tenía «mucha sed». Este testimonio ha sido clave para los investigadores, ya que les ayudó a centrar la búsqueda en una ubicación mucho más precisa.

A lo largo de este mes, hay personas que han viajado hasta la isla canaria para participar en la batida. Una de ellas es Patrick Hill, reportero de 'The Mirror'. Dice que se pasó varias semanas allí junto al fotógrafo Stan Kujawa, que también trabaja en el mismo medio.

Tras conocerse la noticia del hallazgo de restos humanos en Masca, el periodista ha informado de la dificultades de ese terreno. «Sé exactamente cómo pudo pasar desapercibido un cuerpo incluso a unos metros de distancia», ha señalado.

Hill reconoce que el barranco «no se parece a nada que haya presenciado antes». «El terreno accidentado debajo del lugar donde fue visto por última vez sube y baja. Cactus, árboles, arbustos y otros tipos de maleza hacen que la zona sea extremadamente difícil de atravesar, incluso para expertos que lleven botas de montaña y bastones de trekking», sostiene.

El reportero indica que hay «curvas cerradas, senderos estrechos y precipicios peligrosos». «La carretera dejó nuestra camioneta con varios rasguños y un pequeño golpe», añade.

Tras su experiencia en Tenerife y comprobar las «dificultades para llevar a cabo la búsqueda», el comunicador afirma que si el cuerpo es de Jay Slater, es normal que las autoridades hayan tardado cuatro semanas en encontrarlo. «Es una tragedia absoluta, pero estoy agradecido por sus seres queridos de que al menos haya aparecido», concluye.