Hermine deja un «domingo duro» en Canarias, que no «baja la guardia»

Al cierre del informe de ayer, cerca de 2.000 personas habían quedado sin luz en las islas, se había superado la veintena de cortes de carreteras y Cruz Roja había realizado hasta 11.000 llamadas de teleasistencia.

El portavoz de Aemet, David Suárez, ha afirmado que la tormenta «está siguiendo la previsión» con episodios de lluvias «persistentes» en todo el archipiélago que ahora pasarán a convecciones y tormentas con aparato eléctrico. El episodio de precipitaciones más importante ha sido en Gran Canaria, por encima de lo provisto, al igual que La Palma. Ha destacado la importancia de la falta de viento, que «se ha comportado bien» y que ha sido crucial para la gestión de esta alerta.

Marta Moreno, responsable de Protección Civil, ha agradecido el comportamiento de la ciudadanía, y ha detallado algunas de las incidencias, como caída de electricidad, telefonía, alumbrado, casas inundadas, o desprendimientos. El pico más alto se ha dado en la ciudad de Las Palmas de Gran Canaria durante la mañana del domingo y en La Aldea de San Nicolás durante la tarde. A las 17 horas de ayer se habían registrado 1.400 incidencias. «Esto no ha terminado», ha advertido.

Esta es la primera vez que llueve con esta intensidad en Canarias desde hace varias décadas, con unas precipitaciones que dejan cifras récord en varias islas. En La Palma y Tenerife, la última lluvia de estas características se dio en 1967.