Morales: «La planta de gas supondría hipotecar Arinaga»

En su opinión, «en el Polígono de Arinaga se ha hecho una apuesta especial para que no sea un área económica residual, sino para convertirla en un espacio generador de riqueza y empleo. Se ha intentado exportar un modelo basado en las energías renovables, de ahí que nosotros nos opongamos a la Planta de gas», insistió Morales.

La polémica, que ha suscitado numerosos episodios e interminables aristas políticas, sigue enquistada en la actualidad ante la postura del Gobierno de Canarias, el Cabildo y la Mancomunidad del Sureste. En este sentido, la consejera de Empleo, Industria y Comercio del Gobierno de Canarias, María del Mar Julios, afirmó la semana pasada en el Parlamento regional que el Ejecutivo hará «todo lo posible» para la puesta en marcha de la planta regasificadora prevista en la isla redonda.

Por su parte, la diputada del PP Australia Navarro recordó en dicha sesión que el desarrollo de esa planta, prevista en el Plan Energético de Canarias, se encuentra pendiente desde 2004 del informe de impacto ambiental por parte del Ministerio de Medio Ambiente. Ya en 2005, los regidores del sureste grancanario reiteraron al entonces gabinete autonómico que si la planta regasificadora proyectada en el puerto de Arinaga no se instalaba mar adentro, como recomendaban sus técnicos, tampoco se construirá en tierra. Y a partir de ahí, el dilema del gas se ha enquistado como una auténtica utopía.

«Aquí (Arinaga) se hicieron las gestiones para hacer un puerto que sirviera de acicate tanto al Polígono como para las comunicaciones entre el sur y el norte de la isla, pero ese objetivo se ha chafado precisamente por la intención de colocar una planta de gas en este lugar», apostilló Morales en la presentación del I Congreso Regional de Áreas Empresariales llevado a cabo por Ecoaga.

«Tanto los empresarios como este Ayuntamiento consideramos que no debe colocarse una planta de gas ahí, porque además de condicionar muchas de las políticas industriales del polígono, desvalorizaría muchas de las empresas, hipotecaría el funcionamiento de este puerto y pondría en riesgo a la población», explicó.

En contraste, se ha apostado por la construcción de una subestación transformadora para facilitar la implantación de más plantas eólicas y fotovoltáicas por medio de Red Eléctrica. Una infraestructura que podría estar en funcionamiento en 2012.