Vídeo: Presidencia expone a Clavijo a un escrache por el derrame de Gran Tarajal

Algunos manifestantes con sudaderas portaban globos de color negro emulando un proceso similar a una marea negra tipo Prestige cuando no existe. La Guardia Civil estableció un perímetro de seguridad muy discreto para que no se generase mayor tensión cerca del dirigente de Coalición Canaria (CC). Clavijo se marchó de Gran Tarajal dejando atrás gritos vecinales .

El presidente de los canarios experimentó en carne propia la ira de los vecinos. Era la primera vez desde que tomó posesión en Canarias en 2015 que su presencia generaba malestar ciudadano de forma colectiva. Los vecinos le pedían que regresara a Tenerife , donde horas antes había estado con Mariano Rajoy inaugurando el Puerto de Granadilla.

Los vecinos no demandaban explicaciones únicamente sobre el agua. Pedían también inversiones en turismo y que la zona acoja turismo de cruceros. Protestaban, igualmente, porque que la desaladora de agua estaba parada de forma habitual, y que no era un asunto puntual por la presunta contaminación de la zona. Mientras Clavijo atendía a los vecinos, otros más enfurecidos le gritaban: «fuera, fuera, vete a Tenerife, dimisión».

Fernando Clavijo agradeció a los vecinos la « educación » con la que le trataron y que los vecinos tendrían información sobre medidas medioambientales de forma transparente a través de Internet. Una periodista pidió declaraciones . Al rechazarlo, le dijo: «Fernando, tío, que llevamos tiempo esperando». Después de recibir información de los técnicos en un centro de mando, el presidente canario hizo declaraciones pero seguían los abucheos.

Antes de la llegada de Clavijo los ánimos estaban en Gran Tarajal de mal humor. Y eso que el presidente del Cabildo de Fuerteventura , Marcial Morales, y el consejero canario de Pesca, Narvay Quintero, estuvieron dialogando con los ciudadanos. Pero la visita se desbordó.

Las fuerzas de seguridad no se despegaron en ningún momento del presidente canario que, a fin de salvar la situación, intentaba dialogar con la gente de la mejor manera que podía hacerlo en medio de constantes abucheos y ataques a su gestión .