Vox no cambiará su estrategia electoral respecto al PP pese a las encuestas

Jorge Buxadé indicó que los de Santiago Abascal encaran el nuevo curso político y las elecciones de 2023, tanto las municipales y autonómicas primero, como las generales de después, «con toda la ilusión, las fuerzas y el deseo de contribuir». El vicesecretario de Acción Política se mostró realista en cuanto a la situación electoral de Vox y apuntó que defenderán los intereses de los españoles pero por ahora desde la oposición aunque confían en que tras los comicios del próximo año, desde el Gobierno puedan «levantar la situación económica y social».

«Esa es nuestra ilusión y vamos a seguir trabajando, sin grandes alharacas ni cambios de estrategia porque no hay que cambiar ninguna estrategia cuando de lo que se trata es de defender los intereses de los españoles», reivindicó Buxadé.

En su habitual rueda de prensa de los lunes en la sede del partido en Madrid, el eurodiputado de Vox aseguró que no necesitan robar votos a los de Feijóo, al que las encuestas sitúan en primera posición y creciendo, mientras su formación parece estancada y en algunos casos en descenso. «No queremos robarle los votos a nadie, porque los votos no son de nadie», defendió. Buxadé insistió en que tampoco «nadie le robará votos», y, de cara a 2023, «los españoles son libres de tomar las decisiones oportunas».

Las encuestas electorales, tanto a nivel autonómico, como a nivel general, dan la victoria al PP, incluso el CIS de Tezanos se ha rendido y deja a los socialistas como la segunda fuerza más votada. Con los comicios acercándose, los de Feijóo siguen aumentando la distancia entre ellos y el PSOE, y por ende, las demás fuerzas políticas, mientras que los de Abascal se han quedado estancados desde que obtuvieran sus buenos resultados en el Congreso en 2019. Prueba de ello son las elecciones de Andalucía donde apenas consiguieron dos diputados más, frente a sus aspiraciones a liderar la Junta, o en Madrid donde aumentaron en uno sus escaños.

La excepción a esta tendencia, y lo que podría suponer la esperanza al partido, es Castilla y León. En esta comunidad autónoma rompieron con ese estancamiento palpable en Madrid y Andalucía consiguiendo 12 escaños más de ese único obtenido en 2019, además de entrar en la Junta de la región. El pacto para apoyar a Alfonso Fernández Mañueco, incluyó la vicepresidencia, aunque sin cartera. Las últimas encuestas evidencian que Vox resistirá el creciente envite de Feijóo pero todavía se verán afectados por la crecida del centro-derecha al congelarse sus expectativas de crecimiento electoral.

El dirigente de Vox no se mostró preocupado por lo que dicen los sondeos y defendió que las verdaderas encuestas son las convocatorias electorales donde podrá verse lo que realmente quieren los ciudadanos. Buxadé, independientemente de los que digan las cifras, insistió en que su partido va a seguir «en la calle pegados a los problemas de los españoles, olvidándonos de lo que nos digan la Agenda 2030, lo que publique Davos o la Comisión Europea».