Bolaños y Pons se reúnen este miércoles por tercera vez sin perspectiva de acuerdo para el CGPJ

El ministro de Presidencia, Justicia y Relaciones con las Cortes, el socialista Félix Bolaños, no ha dado señales de que acepte cambiar las reglas de elección de los miembros del CGPJ para acomodarlas a los usos normales en toda la UE y el vicesecretario de Acción Institucional del PP, Esteban González Pons, ya ha dicho que, si el Gobierno no quiere cambiar esas reglas, tampoco tendrá el acuerdo para que el Parlamento nombre las vacantes que faltan en distintos tribunales. Por si fuera poco, la reunión de este miércoles será la víspera de que el Congreso de los Diputados apruebe la ley de amnistía, que rechaza frontalmente el PP, lo que vuelve a cerrar todas las puertas para una posible cooperación entre el Gobierno y el principal partido de la oposición.

En realidad, esta tercera reunión bajo la mediación del comisario Reynders se celebra en Estrasburgo (Francia), donde se desplaza la Comisión Europea cuando hay pleno del Parlamento comunitario, en un ambiente especialmente denso por lo que respecta a la política española. Este mismo miércoles está previsto que en la propia Eurocámara haya un debate sobre las sospechas de corrupción en España y que pudieran afectar a los fondos europeos. Está previsto que intervenga en el debate un miembro de la Comisión que probablemente no será Reynders, porque él tendrá que hacerlo próximamente para hablar de la situación generada por la acusación de terrorismo contra el prófugo Carles Puigdemont y de la que la amnistía pretende librarle.

También en Estrasburgo, aunque en el Consejo de Europa, el jueves y viernes se celebrará el pleno de la Comisión de Venecia. En la sesión plenaria está previsto que intervenga el popular Pedro Rollán, el presidente del Senado, que pidió el dictamen sobre la amnistía a este organismo del Consejo de Europa, así como Isaura Leal, diputada socialista y actualmente segunda secretaria del Congreso. El pleno se celebrará con la pesadumbre de que el Gobierno de Pedro Sánchez hubiera roto las prácticas habituales al hacer público el borrador del informe e interpretarlo de forma abiertamente torticera para utilizarlo como argumento propagandístico.

Fuentes del departamento de Reynders aseguran que la reunión de Estrasburgo sería «la hora de la verdad». Aunque reconoce que «no será fácil», el propio Reynders ha llegado a ver «una posibilidad de encontrar vías de solución» para alcanzar «lo antes posible a un acuerdo» con el que estabilizar la situación. No están hablando de un acuerdo, sino «algún avance» para justificar la intervención de la Comisión Europea en el debate político interno de un país miembro.