Rudi acaricia el Gobierno

El sondeo que desveló ABC otorgaba al PP 28 diputados y 26 al PSOE; la que ayer publicó Heraldo prácticamente ofrece un resultado calcado: 28 para los populares y 25 para los socialistas. La diferencia es mínima y la aritmética de pactos, la misma: con 25 ó 26 diputados el PSOE sería incapaz de formar gobierno de coalición ni con el PAR ni con CHA e IU, a tenor de las perspectivas de voto que tienen estos otros partidos. Según la última encuesta conocida, el PAR obtendría siete diputados, CHA tres e IU cuatro. La que desveló en diciembre ABC apuntaba a siete diputados para el PAR, cinco para CHA y uno para IU.

Dicho de otra forma, al PSOE le resultaría imposible revalidar su actual coalición de gobierno y tampoco podría editar un tripartito de izquierdas con IU y con los nacionalistas de Chunta. A los socialistas de Eva Almunia —que se estrena como candidata del PSOE en Aragón tras la marcha de Marcelino Iglesias— les cabría una única opción si se dieran estos resultados: un tripartito con el PAR y con IU, una «exótica» combinación de izquierdas y de centro-derecha regionalista que se experimentó hace tres legislaturas con escaso éxito y que tuvo corta duración. Y solo cabría esa opción porque un tripartito en el que participen CHA y PAR se da por descartado, ante la distancia que separa a ambos partidos, en lo ideológico y por competir los dos por el electorado regionalista o nacionalista.

En la comparativa entre la encuesta desvelada por ABC en diciembre y la publicada ayer por Heraldo hay un dato significativo: las dos coinciden exactamente en el número de escaños que obtendrían el centro-derecha (PP y PAR) y el centro-izquierda (PSOE, CHA e IU). Tanto en uno como en otro sondeo, la suma PP-PAR daría mayoría absoluta, con 35 diputados, mientras que entre PSOE, CHA e IU sumarían 32.

Tendencia nacional

Con esta intención de voto, la candidata del PP, Luisa Fernanda Rudi, está a puertas de alcanzar el Gobierno aragonés, después de tres legislaturas consecutivas de gobiernos presididos por el PSOE. Además, los populares confían en que todavía puedan sacarle más ventaja a los socialistas: creen que en los meses que restan hasta las elecciones municipales y autonómicas de mayo, la erosión que sufre el PSOE a nivel nacional haga mella también en las urnas aragonesas. Un temor que tienen también los socialistas, de ahí su insistencia en el mensaje de que son elecciones autonómicas, no generales: «a estas elecciones no se presenta Zapatero», declaró Eva Almunia en una entrevista publicada hace escasas semanas por ABC.

Entretanto, el PAR que lidera José Ángel Biel sigue perfilándose como la llave para formar gobierno en una Comunidad en la que, históricamente, las urnas no han dado mayorías absolutas a los dos grandes partidos. Antes de estas tres legislaturas que han encadenado en coalición con el PSOE, los aragonesistas ya gobernaron aliados al PP en otros tres mandatos. El PAR celebrará congreso a primeros de marzo, en el que se marcarán públicamente las estrategias ante futuras coaliciones de gobierno. Pero, de antemano, este partido ya ha dado muestras evidentes de su disposición a llegar a un acuerdo con el PP tras las elecciones autonómicas y municipales. Con los resultados que dibujan las encuestas, la aritmética electoral parece que lo harían posible. Luego quedaría la negociación.