Más de mil camiones atrapados por la nieve en las autovías que cruzan la provincia de Zaragoza

A las 07.00 horas de este sábado ya había 970 camiones confinados en áreas de parada forzosa. Se trata de áreas de servicio o zonas de descanso a las que, desde la tarde-noche del viernes, habían ido acudiendo camiones. Con el paso de las horas, esas áreas se han convertido en puntos de parada forzosa de todo tipo de vehículos pesados. Con las primeras luces del día, la situación se ha hecho todavía más complicada y la Guardia Civil ha habilitado más zonas de embolsamiento de camiones, como las que se han regulado de urgencia en las autovías de entrada y salida de Zaragoza capital.

A media mañana ya eran más de mil los camiones confinados en las autovías A-2 y A-23 a su paso por la provincia de Zaragoza, los dos mayores ejes de transporte por carretera de los que depende tanto el tránsito entre Madrid y Barcelona (en el caso de la A-2) como desde el Levante hacia el País Vasco y el Pirineo, a través de la A-23 y del eje que conforman la N-232 y A-68.

Desde primera hora de este sábado quedó prohibido el tráfico de camiones en todas las carreteras de Aragón, en sus tres provincias. En la de Teruel permanecían confinados unos 300 camiones en zonas de estacionamiento forzoso establecidas junto a la A-23. Y en la provincia de Huesca unos 200, concentrados fundamentalmente en la zona de Fraga, en la N-II que conecta con Lérida.

Los turismos sí tienen permitida la circulación, pero siempre que vayan provistos de cadenas o de neumáticos de invierno. Esta restricción se aplica también en las carreteras de las tres provincias aragonesas.

Fuentes de la Guardia Civil han indicado que, pese a lo extremo de la situación, no se han producido hasta el momento graves incidentes en las principales carreteras de la región, porque «el tráfico es prácticamente nulo».

Entre las incidencias que han dejado las últimas horas cabe destacar el accidentado traslado de un herido, cuya ambulancia quedó bloqueada por la nieve durante horas en la autovía A-23, en plena noche, cerca de Cariñena (Zaragoza).