La deuda de las empresas públicas de Aragón ya suma 550 millones de euros

Frenar este incremento continuado de la deuda en las empresas públicas constituye uno de los retos para sanear las arcas de la Comunidad. El objetivo del actual Ejecutivo regional PP-PAR que preside Luisa Fernanda Rudi es evitar que este año las empresas públicas sigan cargándose con más deuda financiera. Y esa es la instrucción que se ha dado ya a los directivos de estas compañías desde el Gobierno autónomo. Aún con todo, fuentes del propio Ejecutivo aragonés reconocen que algunas pueden verse «obligadas» a recurrir a nuevas operaciones de endeudamiento ante nuevas necesidades de financiación. En cualquier caso, afirman que, de darse, serán casos «puntuales» y que deberán ir acompañados de un riguroso plan de reequilibrio económico en esas empresas públicas , algo a lo que todas están obligadas al haber entrado ya en vigor el decreto dictado por el Ejecutivo de Rudi, que extrema los controles de fiscalización sobre estas sociedades y que ordena a todas las que están en pérdidas (la gran mayoría) a acometer un plan de saneamiento.

Las mismas fuentes indican que la primera estrategia que adoptó el actual Gobierno autónomo, tras tomar posesión en julio del año pasado, fue frenar la escalada de la deuda de las empresas públicas. Y consideran positivo que aumentara «solo» un 11 por ciento el último año, porque en ejercicios anteriores el ritmo de crecimiento del endeudamiento en estas sociedades se había disparado.

Fuentes del Gobierno aragonés indican que la situación es preocupante en el caso de las sociedades inmobiliarias (caso, sobre todo, de la Plataforma Logística de Zaragoza "Plaza"), mientras que en el resto mayoritariamente la deuda no es crítica, al estar dentro de límites asumibles financieramente por esas sociedades.

Los 550 millones de deuda que acumula el entramado empresarial del Gobierno aragonés corresponden a las 28 sociedades que controla el Ejecutivo regional (bien por ser el propietario íntegro de las mismas o bien por ser el accionista mayoritario) y a otras dos en las que no es el accionista mayoritario, pero que suman un endeudamiento relevante: Aramón (estaciones de esquí), y, sobre todo, Zaragoza Alta Velocidad (ZAV). Por la participación que el Gobierno aragonés tiene en estas dos últimas sociedades, la parte de endeudamiento que le toca a la Comunidad es de 150 millones, 100 de ellos por ZAV.

Por su parte, las 28 sociedades controladas por el Ejecutivo regional acumulan una deuda que roza ya los 400 millones de euros. La radiotelevisión autonómica suma una deuda de 6 millones de euros, que se elevará a 9 millones este año. Y las otras 27 sociedades de las que el Gobierno aragonés es accionista mayoritario suman en este momento 390 millones de euros de endeudamiento.

De esta cifra, la mayor «losa» es la Plaza, que acumula una deuda de 113 millones de euros. El saneamiento económico de esta empresa, además, es complicado. Su activo es el suelo industrial, y el mercado inmobiliario está hundido. El problema es que fue acumulando deudas pese a haberse lanzado en tiempos en los que sí había bonanza económica y una fuerte actividad inmobiliaria. La gestión de esta sociedad durante la anterior etapa de gobiernos presididos por el PSOE ha sido muy controvertida. De hecho, algunas de las operaciones realizadas años atrás han sido ahora puestas en conocimiento de los juzgados al detectarse irregularidades.