Aragón baraja una vuelta al cole con la mitad de días de clase a partir de 3º de ESO

Es la fórmula que está considerando en firme la Consejería de Educación ante el complicado panorama epidemiológico que tiene esta región tras dos meses de severos rebrotes, y el incierto escenario al que se enfrenta de cara al otoño. El Gobierno de Aragón ha reconocido abiertamente que va a ser un curso difícil, y pide a las familias que lo asuman.

De entrada, para reducir el contacto, desde tercer curso de la ESO la idea es dividir cada clase en dos grupos de alumnos. Así, cada grupo iría al aula en días alternos. Es decir, la mitad tendrían clase presencial los lunes, miércoles y viernes, y la otra mitad los martes y jueves. Y cada semana se invertiría el turno de cada grupo: al que le tocara clase presencial el lunes, miércoles y viernes, a la semana siguiente le correspondería el martes y el jueves.

Lo que aún queda por perfilar es qué ocurrirá si se produce un contagio en un aula. El protocolo sanitario está claro –la consabida cuarentena del afectado, el aislamiento preventivo de los contactos de riesgo y las PCR de detección–, pero lo que no se ha concretado es qué consecuencias organizativas tendría en el día a día del centro educativo.

Con este modelo, las clases solo serían semipresenciales desde tercero de ESO. En todos los cursos inferiores, la previsión es que los alumnos tengan clase presencial todos los días laborables, aunque en las aulas se aplicarán normas de prevención para reducir los contactos interpersonales y evitar que se mezclen alumnos de aulas distintas. Esto último se prevé que sea norma general para todos los niveles.

En cualquier caso, la decisión definitiva aún no se ha tomado. El planteamiento que baraja la Consejería aragonesa de Educación ya ha trascendido en firme para que lo conozca la comunidad educativa, las partes directamente implicadas. Pero aún no se ha acordado oficialmente y está por ver cómo queda al final.

El curso arranca en Aragón el 7 de septiembre y, ante el planteamiento que ha hecho la Consejería de Educación, desde algunas organizaciones de padres de alumnos ya han pedido a la Administración autonómica que tenga en cuenta la conciliación laboral y familiar. Más aún teniendo en cuenta que, según cómo evolucione la pandemia, el escenario puede ser todavía más enrevesado conforme avance el año académico.