El truco definitivo para eliminar las hormigas en casa

¿Qué podemos hacer para frenar su avance? Más allá de las técnicas de fumigación con pesticidas y otros productos químicos, hay ciertos remedios caseros mucho menos invasivos con el medioambiente y con nuestra vida en casa, sobre todo si tenemos niños pequeños o mascotas.

Si aún no nos hemos visto afectado por una invasión de hormigas en nuestra vivienda, hay ciertos métodos de prevención que pueden resultar bastante efectivos, tales como los granos de café, la menta, el laurel, la pimienta negra o el ajo. Se pueden colocar de forma estratégica por el hogar, su olor se encargará de mantener alejadas a las hormigas y a otros insectos.

Si estos pequeños invertebrados se han apoderado de nuestra vivienda, los remedios mencionados anteriormente también pueden contribuir a una más rápida desaparición, además de evitar que vuelvan a aparecer. Sin embargo, hay un truco infalible que debería servir para ahuyentar a todas las hormigas sin necesidad de llamar al fumigador ni de usar productos químicos.

Se trata de mezcla de agua y vinagre a partes iguales. Como si de fregasuelos se tratase, debemos aplicar la solución sobre el suelo, pero también los rincones de las estancias y todo aquel lugar en el que pueda haber algún resquicio de entrada para las hormigas (aunque conviene cerrar las grietas que veamos). Tampoco está de más cubrir el fregadero y las ventanas con esta clásica mezcla.

El fuerte olor del vinagre actúa como un eficaz repelente frente a estos y otros insectos. No obstante, si no nos agrada el mismo, vemos que no da resultado o no disponemos de vinagre, otra alternativa es llevar a cabo el mismo proceso, pero en este caso con zumo de limón sin diluir en agua. Su acidez minará el sentido de la orientación de las hormigas y mantendrá a raya su aparición.