Tres asesinatos a quemarropa: los crímenes en Andalucía del etarra liberado por el PSE

Ahora, el Partido Socialista de Euskadi (PSE) ha aprobado, a propuesta de la Junta de Tratamiento Penitenciario, el tercer grado para uno de los dos asesinos, Harriet Iragi, quien había sido condenado a más de cien años de prisión por los tres crímenes que cometió en Andalucía. Semanas antes de matar al doctor Muñoz Cariñanos ambos etarras habían asesinado al concejal malagueño del PP José María Martín Carpena y del fiscal jefe del TSJA Luis Portero.

Además, en el año y medio que los dos pistoleros estuvieron operativos en Andalucía intentaron matar al dirigente socialista de Málaga José Asenjo, a dos suboficiales del Ejército y a un empleado civil del Ministerio de Defensa mediante la colocación de bombas-lapa en sus automóviles que no llegaron a estallar.

La carrera criminal de Harriet Iragui comenzó en los primeros meses de 1999, cuando ETA decidió reconstruir su infraestructura en el sur de España después de que en mayo de 1998 la Policía detuviese a los tres terroristas que habían asesinado a Alberto Jiménez Becerril y su mujer, Ascensión García Ortiz.

El nuevo comando Andalucía se instaló en un piso franco ubicado en el bloque 5 de la plaza Playa de Punta Umbría, en la Macarena. Tras meses de labores de seguimiento y varios atentados fallidos, a las 21:40 de la noche del sábado del 15 de julio de 2000 asesinaron al concejal del PP José María Martín Carpena frente a su a domicilio, cuando se dirigía su coche para asistir con su mujer y su hija al Pregón de la Biznaga.

El terrorista que disparó, en este caso Jon Igor Solana, tuvo que realizar seis disparos porque la hora de cometer el crimen le tembló el pulso y erró los primeros dos tiros. El concejal intentó refugiarse entre los coches pero fue alcanzado por el etarra, que le alcanzó con cuatro nuevos tiros, uno de los cuales le impactó en la nuca. Posteriormente huyó en un coche conducido por Harriet Iragi.

Sólo cuatro días después del asesinato de José María Martín Carpena, ambos terroristas intentaron asesinar al entonces número dos del PSOE andaluz, José Asenjo. El fallo en el detonador de una bomba lapa adosada a los bajos de su coche salvó al político, a su mujer y a su hija de 15 años que viajaban con él.

Los terroristas no volverían a matar hasta después del verano. El 9 de octubre se dirigieron a Granada y asesinaron a Luis Portero de dos tiros por la espalda cuando esperaba el ascensor para subir a su casa a almorzar con su mujer. En este caso disparó Harriet Iragi. Horas después, mientras el fiscal jefe de Andalucía agonizaba en el hospital, un miembro de la banda terrorista telefoneó al domicilio familiar para «confirmar» que había muerto.

Una semana después, el 16 de octubre, ambos terroristas se dirigieron a la consulta del doctor Muñoz Cariñanos, en la calle Padre Cañete de Sevilla, con quien habían concertado una cita médica. Además de otorrinolaringólogo, Muñoz Cariñanos era coronel del Ejército del Aire. Accedieron a su despacho a cara descubierta y le dispararon varios tiros a bocajarro.

Los etarras salieron a la carrera ante el estupor de las personas presentes en la clínica, que avisaron a la policía. Se inició entonces una espectacular persecución con cruce de disparos que acabó por la zona de la Macarena con la detención de dos terroristas de forma inmediata y un tercero, ya herido, de madrugada.