Un tercio de los andaluces carece de habilidades digitales básicas

Un estudio de la Junta revela que, pese al auge de la tecnología, más de dos millones de andaluces no tienen conocimientos para usarla

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Pese al incremento desmesurado de los soportes digitales en los últimos años, un tercio de los andaluces sigue sin tener habilidades digitales básicas para desempeñarse con estos aparatos. Concretamente, el 1,8 por ciento de la población andaluza no posee habilidad digital alguna y ... hasta un 33,8% posee habilidades digitales bajas. La unión de estos dos valores conlleva considerar que hasta un 35,6% del total de la población andaluza no posee competencias digitales al menos básicas, lo cual representa a más de dos millones de personas. La brecha digital viene marcada básicamente por dos factores, el formativo y el económico, y su incidencia se hizo patente por primera vez en el confinamiento de la pandemia, ya que se advirtieron las dificultades de unos alumnos respecto a otros a la hora de seguir el curso lectivo en formato digital.

Estas son las principales conclusiones del diagnóstico realizado por la Agencia Digital de Andalucía, un estudio incorporado al Plan de Capacitación Digital de Andalucía, con el que la Junta pretende paliar estos desequilibrios en el uso de las nuevas tecnologías. Se trata de un programa multidisciplinar, a desarrollar hasta 2025 y dotado en una primera fase con 184 millones de euros, cuyo objetivo es expandir el uso de internet para todo tipo de proceso administrativo y lograr que toda la sociedad andaluza se integre en esta revolución digital.

Desequilibrios

La realidad digital en Andalucía no es hoy sustancialmente peor que en el resto de España, pero dista aún bastante de la plena integración. El informe recoge que el proceso de transformación digital «se ha acelerado muy significativamente a raiz de la crisis sanitaria originada por la pandemia del Covid-19, que ha provocado que la adaptación al contexto digital se haya convertido en una obligación». La radiografía de la realidad actual en la comunidad autónoma muestra que «esta aceleración no se viene percibiendo y aplicando de igual forma en todos los niveles, siendo desigual en diversos contextos socioeconómicos, por edades, género, situación geográfica, etc...»

Concretamente, el diagnóstico realizado por la Agencia Digital de Andalucía establece tres tipos de brecha digital: de acceso, que refleja la diferencia entre las personas que pueden permitirse acceder a las Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC)y las que no; de uso, consistente en las personas que saben utilizar esta tecnología y las que no, y de calidad de uso, que pone de manifiesto las diferencias cualitativas entre los usuarios. También valora el concepto de pobreza digital, que relaciona los niveles de uso de las nuevas tecnologías con el nivel de ingreso de las familias. En este sentido, más del 90% de los hogares españoles tiene acceso a internet. No obstante, cerca de 100.000 viviendas no tienen opción de conectarse, y un 20% de ellos ni siquiera se dispone de ordenador.

Con todo, en Andalucía, los niveles de uso digital no son malos. Tan solo el 5,9% de la población andaluza no ha hecho uso de internet en los últimos tres meses. El 94,4% de los jóvenes entre 16 y 25 años está familiarizado y usa frecuentemente las redes sociales, un porcentaje que desciende hasta el 41,3%, más de 52 puntos, cuando se refiere al grupo de edad mayor de 25 años.

La brecha originada en función del nivel de formación es importante. Por ejemplo, el 71,2% de la población realiza ya gestiones bancarias en internet, pero este porcentaje se reduce al 36,6% entre la población con estudios primarios. La brecha por el nivel educativo se advierte igualmente en el acceso a los archivos personales del sistema de salud o a la información de páginas web y aplicaciones de la administración pública. Por otra parte, el 86,1% de las personas con menores ingresos utiliza la red al menos cinco días por semana, un porcentaje que sube al 96,6% en el caso de las personas con más ingresos.

Medio rural y medio urbano

Otro sesgo evidente en el análisis de la realidad digital andaluza es el territorial. En las zonas rurales disponen de ordenadores un 68,9% de la población, frente al 82,3% de los andaluces que residen en ciudades. Las diferencias se mantienen en cuanto a la disponibilidad de smart TV(71,6% en el medio urbano frente al 59,4% del rural) o en tablets (60,4% de las ciudades frente al 48,9% de zonas rurales). En lo referente a la conexión, la disponibilidad en el medio urbano es del 95,1% frente al 89,7% del medio rural).

En cuanto a los dispositivos electrónicos en los hogares andaluces, el más común es el teléfono móvil, utilizado por un 99,1% de la población. Su uso está extendido por todas las franjas de edad, aunque el porcentaje desciende tres puntos entre los 66 y 75 años. Atendiendo al nivel de ingresos, las familias que ingresan menos de 900 euros al mes disponen menos de ordenadores (51,4%) y tablets (34%) que aquellos núcleos familiares con ingresos superiores a 3.000 euros al mes, en las que estos porcentajes se disparan al 97,1% y 79,1% respectivamente.

En el plano empresarial, existe mucha diferencia entre las grandes y pequeñas y medianas empresas, aunque la concienciación en la importancia de la digitalización es generalizada. De hecho, el 77% de las empresas andaluzas han invertido en digitalización en los últimos dos años, sobre todo en conectividad y seguridad. El 46% de las empresas andaluzas se consideran en un nivel medio de digitalización, mientras que el 19% se ubican a si mismas en un nivel avanzado.

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