Susana Díaz abre las urnas buscando «estabilidad y certidumbre»

Este «adelanto técnico » –los andaluces tendrán que votar cuatro meses antes de lo previsto–, ha sido una decisión meditada y que ha tomado tras consultar a los agentes sociales según desveló la misma Susana Díaz. Y lo hace porque Andalucía «no merece la inestabilidad del resto de España», según dijo rotundamente. Un mensaje claro, contundente, que no sólo está dirigido a los futuros votantes sino también al propio presidente del Gobierno Pedro Sánchez. Y eso que Sánchez ha sido el primero a quien ha llamado después de tomar la decisión de abrir las urnas y que tanto ella como la nueva portavoz de la Ejecutiva Federal del PSOE han insistido en la misma idea, «la relación es fluida» y hay «buena sintonía».

Susana Díaz adelanta las elecciones por varias razones según dijo en público pero en todas tuvo el cuidado de poner por delante el interés de Andalucía . O, para ser más precisos, lo que ella considera que es el interés de Andalucía. La primera es la estabilidad. Si la votación es el 2 de diciembre, el año 2019 empezará con un nuevo Parlamento que hará posible aprobar un Presupuesto que, según su versión, ahora no es posible sacar adelante por la ruptura del pacto que ha hecho Ciudadanos y la falta de voluntad real de PP y Podemos de pactar las cuentas públicas. Un argumento cuanto menos curioso sobre todo si se tiene en cuenta que no hay presupuesto que negociar, que la formación naranja considera que ha sido el PSOE quien ha impedido la negociación y que tanto PP como Podemos se han ofrecido a negociar.

Su segunda razón es evitar una campaña electoral que dure cinco o seis meses. «Lo hago por responsabilidad », dijo para terminar reiterando lo que lleva meses en su agenda, quiere un debate netamente andaluz centrado en los problemas regionales.

Susana Díaz es plenamente consciente del tirón que tienen los líderes nacionales tanto del PP como de Ciudadanos que se van a volcar en la campaña andaluza que es estratégica para ambas formaciones . Por eso avanzó que su interés pasa «por la comunidad más importante de España; Andalucía es donde viven más españoles». Su argumento en simple pero muy claro: no va a permitir que Andalucía se convierta en un laboratorio de ensayo para los partidos.

Y hay un dato muy revelador. Pedro Sánchez no podrá estar en la campaña andaluza ni en el inicio ni en el final debido a su agenda internacional . El arranque de la campaña coincidirá con la cumbre iberoamericana en Guatemala y el cierre de campaña con el G-20 en Argentina. ¿Casualidad? Será difícil verificarlo pero los socialistas andaluces estiman que el presidente del Gobierno les resta votos más que sumárselos. Justo lo contrario de lo que creen en Ferraz, donde aseguran que Susana Díaz «es muy inteligente y sabe que entre nuestros electores Pedro ahora arrastra más que ella, cuando antes allí era claramente al revés».

La convocatoria electoral disuelve la comisión de investigación de las tarjetas opacas de una fundación de la Junta, la Faffe, que se utilizaron para pagar en prostíbulos pero no podrá tapar el escándalo que sigue su periplo judicial y que ayer el PP aprovechaba desvelando hasta 43 cargos en prostíbulos de Sevilla, Cádiz y Córdoba con dinero público.

Susana Díaz no pronunció ni una sola palabra al respecto a pesar de las preguntas de la prensa al respecto . La presidenta —que nunca ha pronunciado la palabra Faffe ni prostíbulo ni tarjetas— evitó el asunto remitiéndose a las palabras de su vicepresidente Manuel Jiménez Barrios y a las explicaciones de su consejero de Empleo.

En este escenario resulta llamativo destacar que en Canal Sur Televisión se retransmitió en directo toda la comparecencia de la presidenta anunciando la convocatoria electoral. Y durante toda esa retransmisión estuvo en pantalla un rótulo anunciando el programa de la noche «Objetivo al Sur: Prostitución». Un insólito error.

Y si no habló de la Faff e tampoco tuvo hueco para la autocrítica. Susana Díaz reconoció que había «algunas leyes » que se habían quedado pendientes pero dejó claro que su Gobierno seguirá trabajando hasta que se abran las urnas. Hoy hay Consejo de Gobierno, el próximo miércoles su consejero Arellano se reunirá con la ministra de Hacienda y el 26 de octubre habrá consejo de ministros en Sevilla.