El PSOE andaluz se rebela ante Sánchez por las desigualdades con Cataluña

La ponencia marco que se va a debatir en el 40 Congreso Federal que tendrá lugar el próximo fin de semana recoge explícitamente la defensa de una «España multinivel» y un reconocimiento expreso a la necesidad de buscar un mejor encaje a Cataluña. Textualmente, en su propuesta 1.957 dice «la España multinivel moderna es la que ofrece cauces democráticos de diálogo y pacto en el marco de la ley para dar salidas a situaciones como la de Cataluña, en clave de mayor profundización del Estado de las autonomías».

Un concepto que sustituye a la «España plurinacional» que aprobó el 39 Congreso del PSOE y al que ahora se da una vuelta de tuerca más . Porque el concepto «multinivel» se incluye también en la propuesta número 1.955 esta vez relativa al reparto del dinero que llega desde la Unión Europea, «Los fondos europeos —un programa de genuina naturaleza federal— representan una ocasión única para contribuir a la transformación de la economía española y de su gestión concertada y multinivel depende también que seamos ágiles, eficaces y capaces de reducir las brechas de desigualdad».

El planteamiento se advierte como un riesgo potencial y varias provincias, entre ellas Sevilla y Málaga, han presentado varias enmiendas en las que piden garantizar igualdad de derechos entre los diferentes territorios, y reclaman también que la profundización del autogobierno catalán no genere «agravios comparativos ni más derechos políticos y económicos respecto a otras autonomías». Estas enmiendas cuentan con un respaldo suficiente en sus agrupaciones y por eso han llegado hasta el Congreso Federal.

Si en la comisión correspondiente de este cónclave logran más de un 20% de apoyos, se debatirán en el plenario. Otra enmienda firmada por el PSOE de Sevilla recoge que los socialistas también deben hacer una «apuesta firme por no generar agravios comparativos en materia de financiación que ahonden el surco ya abierto entre Cataluña, Navarra y el País Vasco con el resto de los territorios del Estado». Y va más allá, asegurando que «los temas económicos son los importantes para esas comunidades ricas e insolidarias».

Al Congreso de Valencia también llegará otra enmienda de Sevilla que proclama que «las desigualdades dentro del territorio nacional, sobre todo en el Sur y en el Norte, deben ser atendidas por el proyecto socialista. La vertebración del territorio debe ir de la mano de la cohesión territorial, sirviendo ambas como ejes de la España federal de interdependencias en las que los y las socialistas creemos».

Por su parte, una enmienda de Málaga avisa de que ese mayor encaje del autogobierno de Cataluña se debe dar sin que eso produzca «más derechos políticos y económicos respecto a otras autonomías y a la ciudadanía que viven en las mismas».

Desde Málaga hay otra enmienda al punto en el que el PSOE habla en su ponencia de promover la cultura federal desde la solidaridad. El texto defiende que se implemente un «federalismo simétrico» que permita cumplir «con las reivindicaciones históricas de muchos territorios dotándoles de más competencias pero al mismo tiempo salvaguardar el principio de igualdad, seña de identidad» del PSOE.

Las propuestas presentadas por las direcciones provinciales defienden el mismo concepto político que Juan Espadas considera que debe ser la bandera del PSOE andaluz . Otra cosa es que el secretario general de los andaluces prefiera una actitud «menos beligerante» para evitar un choque frontal con Ferraz al expresado por las provincias.

Pero lo cierto es que cuenta con apoyos de otras federaciones socialistas que también se han pronunciado en términos similares. Es el caso de la enmienda presentada por Orense, en la que se propone modificar ese punto, para afirmar en su lugar que «la España plurinacional moderna debe buscar cauces de diálogo para ofrecer un encaje adecuado a las nacionalidades históricas de Galicia, País Vasco y Cataluña, fomentando el diálogo, la sensibilidad y la cooperación».

Además, la federación valenciana ha avalado una enmienda en la que reclama una España «policéntrica », que se haga realidad, entre otras cosas, mediante la descentralización de los organismos del Estado, más allá de la capital.

«El centralismo es ineficiente, pero también es insolidario. Actualmente nos encontramos con una concentración de organismos públicos en la capital del Estado que rompen con los esquemas de la España plural y descentralizada que el Partido Socialista defiende», denuncia esta enmienda.

Desde el PSOE andaluz explican a ABC que consideran muy valioso el paso que ha dado también en este sentido el PSC. El pasado viernes, el secretario de Organización de los socialistas catalanes y exministro de Sanidad, Salvador Illa, evitó intencionadamente hablar de «ordinalidad», una bandera que los socialistas catalanes no habían soltado hasta ahora. Ese principio de «ordinalidad» propugna una limitación del fondo de solidaridad interregional para evitar que las comunidades más ricas, tras aportar al fondo común, bajen puestos en financiación per cápita o recursos.

La complicada situación política de Illa, que no quiere dar alas a Pere Aragonés, podría estar detrás de este relativo cambio que levantará polémica en los debates del Congreso Federal.