Qué pasó en Andalucía el 4D del que discuten Pablo Iglesias y Francisco Robles

[ El rifirrafe entre Pablo Iglesias y Paco Robles a cuenta de Cataluña y el 4-D andaluz ]

Pero, ¿qué pasaba aquel 4 de diciembre de 1977 en España y en Andalucía? En plena transición hacia la democracia , la Constitución (que se aprobó en el año siguiente, en 1978) reconocía dos vías de acceso a la autonomía. Una «preferente» y otra para el resto. En la privilegiada estaban lo que se consideraba autonomías históricas ( Cataluña, País Vasco, Galicia ) y se orillaba a otras regiones como Andalucía. Es lo que se conocía como la vía del 151 frente a la vía del 143 (que hace referencia a los artículos de la Constitución en que se desarrollaba el acceso a la autonomías de la España entonces aún centralista). Venía a legitimar a quienes llegaron a tener un estatuo de autonomía antes de la Guerra Civil , a lo que Andalucía no llegó por los pelos.

Los andaluces, en aquel hervidero político que supuso la transición, tuvieron claro que querían estar en el grupo de lo que luego se conocería como el 151. Querían igualdad con las llamadas «comunidades históricas». Y para ello se echaron a la calle en multitudinarias manifestaciones que llenaron todas las capitales de la comunidad ese 4D . Incluso en Madrid y Barcelona se produjeron marchas en favor de una Andalucía con autonomía igual a la de Cataluña, País Vasco o Galicia. El camino para el 151 era más complicado pero, a la vez, dotaba de una mayor rapidez al proceso y permitía llegar al techo de competencias que otorgaba el Estado a las regiones de España mucho más rápido.

«La noticia es contundente: jornada plebiscitaria de un pueblo que despierta a su propia conciencia. Desde Despeñaperros hasta las Columnas de Hércules, desde la salida mediterránea del sol hasta su occidente atlántico, el mismo grito, la misma bandera y la unísona demanda: Andalucía autónoma ». Así arrancaba la crónica de esa jornada histórica en ABC de Sevilla. «En Sevilla faltó espacio para contener a la masa de manifestantes [...] Clima sereno y alegre, al que no faltaron niños y mayores, muchachos de barrio y mujeres vestidas de domingo, ni siquiera el sol y los sones de la Giralda. Si exceptuamos la nota luctuosa de Málaga , la sordina de la sensatez redujo los incidentes en todas partes a la mínima expresión».

Las manifestaciones fueron de tal magnitud -un millón y medio de personas según las crónicas del momento- que «la consecuencia más inmediata es la concesión de la preautonomía a Andalucía en abril de 1978», explican desde la Junta de Andalucía. A partir de ahí las cosas suceden rápido. La Junta se constituye en junio de 1979 y decide acogerse al 151 para acceder a la autonomía plena. Y se convoca el referéndum que contemplaba la Ley y sancionaba la Constitución.

El único problema es que, para acceder al 151 la normativa impuesta suponía que había que sacar la mitad más uno de los votos afirmativos en el referéndum sobre el censo electoral, no sobre el total de la población. Eso ponía más lejos la vía rápida. Pero el 28F los andaluces cumplieron en siete de las ocho provincias. En todas ellas la mayoría votó sí al Estatuto de Autonomía . Todas salvo Almería, donde el resultado se quedó a las puertas del sí (119.550 votos a favor, y 11.450 en contra, y 12.527 en blanco) . «Tras intensos debates, la modificación de la Ley Orgánica de modalidades de referéndum permite desbloquear la autonomía andaluza, que se completa con la aprobación del Estatuto de Autonomía de nuevo en referéndum», explican desde la Junta . La reforma de la Ley, que se hizo desde las instituciones y dentro de la Constitución, permitió desbloqeuar un proceso de autonomía para que Andalucía tuviese más autogobierno dentro de España.

Justo en este punto es donde parecen chocar el líder de Podemos Pablo Iglesias y el periodista de ABC y escritor Francisco Robles. Iglesias compara la tensión en Cataluña y el referéndum ilegal del 1 de octubre con un reféndum legal y dentro de la Constitución que se celebró en Andalucía el 28 de febrero de 1980. Y apela al espíritu del 4 de diciembre, cuando los andaluces salieron a la calle para pedir igualdad en el acceso a su estatuto con las algaradas de quienes en Cataluña quieren la secesión. «Pablo Iglesias reescribe con mentiras la historia», le acusó la presidenta de la Junta de Andalucía, Susana Díaz. «No hubo golpe contra la Constitución», resume Robles.