El AVE que no llega a media Andalucía por la «baja velocidad» de la inversión

Amén del reclamado eje Algeciras-Bobadilla , la llegada de la alta velocidad a las cinco capitales andaluzas que carecen de este servicio ferroviario se ha convertido en una deuda histórica. Los proyectos de nuevas estaciones y trazados existen, pero en los últimos años la inversión no ha viajado precisamente en alta velocidad cuando baja por Despeñaperros. Sólo Granada espera contar con AVE en 2019, después de permanecer más de tres años aislada por tren .

Más de tres años después de que Granada quedara aislada ferroviariamente, la provincia sigue a la espera de la reconexión por tren convencional y de la culminación de las obras del AVE, que se encuentran «en su recta final» , señalan fuentes oficiales de ADIF. Después de que en marzo se auscultaran y corrigieran la vía y la catenaria, los trabajos se están centrando en garantizar la seguridad de la infraestructura.

Hasta mayo está previsto que se mantengan las pruebas de carga sobre las vías , mientras paralelamente se culmina el cierre de todo el recorrido. Los taludes están recibiendo tratamientos para evitar la erosión del terreno. Además, ya se han iniciado las pruebas de verificación del sistema de comunicaciones ferroviarias.

Antes de dar por concluida esta fase, está pendiente la señalización en las vías. Una vez se hayan ajustado los elementos ya instalados, ADIF podrá redactar el informe preceptivo para empezar a realizar pruebas dinámicas y posteriormente las pruebas de fiabilidad y simulación comercial, que se mantendrán hasta que los indicadores obtenidos permitan la ansiada puesta en servicio del AVE .

Entretanto, las obras prosiguen en los exteriores de la estación en Granada, cuya urbanización ha entrado ya en su segunda fase. ADIF también continúa actuando en Loja, donde está «a punto de terminar» la colocación de la vía auxiliar en la nueva estación de San Francisco , que fue demolida el pasado año sin previo aviso. Allí, hace solo una semana, se dio otro importante paso para terminar las obras con la colocación de la pasarela para peatones.

Los presupuestos del Estado dedicados a esta infraestructura ferroviaria hacen sentir a Almería que seguirá ocupando el vagón de cola, pero estacionado en una vía muerta. De los poco más de 89 millones previstos en las cuentas para la línea de alta velocidad ferroviaria entre Almería y Murcia , 81,7 son para la vecina región y el resto para la provincia almeriense.

Teniendo en cuenta el compromiso del ministro de Fomento, Íñigo de la Serna, la llegada del AVE no se espera para antes de 2023 , si se mantiene el calendario previsto que ha sufrido una infinidad de alteraciones. Y no sólo eso, sino que es imprescindible que los presupuestos salgan adelante.

De lo contrario, la ralentización actual se prolongará más de lo deseado. En concreto, para ejecutar la línea de un solo ancho de vía, no doble como ocurre en el resto del Corredor Mediterráneo, se precisan 4.000 millones y hasta la fecha se han invertido 800.

Si en las cuentas de 2018 hay previstos cerca de 90, siguen faltando más de 2.100 a repartir entre las próximas cuatro anualidades, siempre según las previsiones más optimistas. Aún no están licitados los seis tramos principales , esto es, Nonduermas-Sangonera, Sangonera-Lorca, Lorca-Pulpí, Pulpí-Vera, Los Arejos-Níjar y Níjar-Almería, que suman 162 kilómetros de trazado.

Entre ellos hay parte del trazado terminado, como ejemplo los túneles tapiados de Barranco de Gafarillos, en el término municipal de Sorbas. Corresponden a la última legislatura de Rodríguez Zapatero , donde el desarrollo de la obra, en los cerca de 110 kilómetros que discurren por suelo almeriense, se llevó a cabo sin un orden lógico.

El anuncio de la visita del ministro a la Diputación de Almería, para ser distinguido con su escudo de oro el 28 de marzo, dio un insuficiente empujón al proceso burocrático de esta obra. En concreto, permitió que Fomento anunciara la expropiación de centenares de fincas, a lo que se sumó el compromiso del ministro de conectar el tren con el puerto de Almería y de soterrar las vías en la zona final antes de alcanzar la estación intermodal, pero no desde el comienzo de la barriada de El Puche, que es desde donde lo reclama la sociedad almeriense.

Huelva sigue f uera del mapa de la alta velocidad en la red ferroviaria nacional a pesar de que los distintos gobiernos (PP ahora y PSOE en pasadas legislaturas) se han venido refiriendo a la nueva estación –que se presume que entre en funcionamiento este año– como «la estación del AVE». Basta echar un vistazo a la cartelería que (antes y ahora) informa del demandado servicio por los onubenses.

Desde que la ex ministra socialista de Fomento Magdalena Alvárez presentara el faraónico proyecto de estación diseñado por Calatrava (2007) hasta la fecha, los plazos de finalización de la obra y la llegada del AVE se han ido posponiendo o estirando (a conveniencia) en las previas de cada cita electoral.

Con el PSOE en el Gobierno central, se echaron unas capas de tierra a ambos lados del conocido como puente de Cádiz para anunciar que las obras se iban a iniciar. Posteriormente, con el PP –en la última convocatoria municipal–, se tiró abajo el referido puente para que se visualizara el mismo anuncio.

Ha sido en esta legislatura cuando finalmente han comenzado las obras de la nueva estación, a la que los Presupuestos Generales del Estado (PGE) destinan este año una partida de 7,5 millones . El coste total de la infraestructura es de 44,4 millones. La obra está practicamente concluida.

La inauguración está cerca pero aún no hay fecha señalada. Según indicaron fuentes del Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (ADIF), falta la supervisión de la Agencia Estatal de Seguridad Ferroviaria y contar con su visto bueno antes de que comience a rodar.

La nueva infraestructura comenzará a recibir trenes este año —si el calendario previsto no registra nuevos atrasos— pero no serán de alta velocidad en tanto que la línea proyectada entre Huelva y Sevilla contempla el ancho ibérico (vías por las que no puede circular un AVE) , de forma que la denominación es de «altas prestaciones».

En un mes (el próximo mayo), comienzan a contar los plazos. El estudio informativo de la línea se someterá a partir del mes que viene al trámite de información pública y audiencia, según anunció el ministro de Fomento, Iñigo de la Serna. Es el paso previo a la solicitud de Declaración de Impacto Ambiental (DIA) al Ministerio de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente.

El proyecto presupuestario plantea una inversión plurianual de 400 millones , con partidas crecientes desde este ejercicio de 2018 hasta el año 2023. Este año se queda en un millón de euros para la redacción de los proyectos, entre los que figura la construcción de un nuevo trazado de 45 kilómetros de longitud entre Valencina de la Concepción y la Palma del Condado, así como variantes en las principales localidades.

Información elaborada por Leo Rama, Raquel Pérez, J.J.Madueño y M. Rosa Font