La Junta «vende» un plan de ayudas cuyo plazo cumple tres días después

Hasta el pasado martes, 2 de agosto, cuando el Consejo de Gobierno aprobó el nuevo Plan de Vivienda de Andalucía 2016/2020 cuyo eje principal es, precisamente, el fomento del alquiler. Ese día el consejero Felipe López dio muchos detalles de este plan e hizo hincapié en destacar que la Junta va a sufragar el 40% de la renta de la vivienda habitual a familias en situación de vulnerabilidad. Una convocatoria pública cuyo plazo vence mañana viernes 5 de agosto, es decir, sólo tres días después de que la Junta la haya anunciado públicamente a bombo y platillo.

La orden de subvenciones, que se convoca en concurrencia competitiva, entró en vigor el pasado 5 de julio y la Junta ha dado el plazo sólo de un mes (y casualmente durante julio y agosto) para que lo soliciten quienes estén interesados. Hay que destacar que, hasta el martes, el consejero de Fomento y Vivienda no había anunciado públicamente esta convocatoria de ayudas.

El departamento de prensa de la consejería distribuyó la información el 5 de julio, el día que se publicó en el BOJA y se iniciaba el trámite para pedir estas ayudas. Pero nada más. Ni más publicidad, ni más recorrido para una orden tan relevante y demandada por las familias como por los partidos políticos, que han hecho numerosas críticas al respecto.

Sí que es cierto que ha habido una cierta difusión en dos provincias concretas. El 11 de julio, el delegado territorial de Fomento de Jaén, Rafael Valdivieso, anunció que se estaban entregando las ayudas del año 2015 y que estaba abierta una nueva convocatoria. El 27 de julio hizo lo mismo su homóloga en Huelva, María José Bejarano.

En total, la Junta ha previsto un presupuesto de 16,3 millones de euros para este año 2016, una cantidad con la que se pretende dar cobertura a 9.765 familias, aunque será difícil de ejecutar en su totalidad por la premura de tiempo con la que los solicitantes deben entregar toda la documentación ante la administración andaluza.

La orden de ayudas que se ha publicado para el alquiler es más restrictiva que las que ponían en marcha hasta el año 2014 . En primer lugar, se eliminan las ayudas directas a las familias desahuciadas y se incluye a todas las familias vulnerables o con recursos limitados en la misma convocatoria. No obstante, sí se especifica en la orden de la Consejería de Fomento que las familias en riesgo de exclusión social podrán complementar esta ayuda hasta alcanzar un máximo del 80% de la renta mensual .

El importe subvencionado también se ha reducido considerablemente ya que la Junta sólo paga hasta el 40% de la renta cuando la orden anterior recogía hasta el 75% de la misma . El tope máximo está establecido en 200 euros mensuales, y la renta mensual del alquiler del piso no podrá superar los 500 euros. Además, los beneficiarios no deberán poseer ninguna vivienda en propiedad y ser titulares de un contrato destinado a la vivienda habitual y permanente.

También cambia el baremo para conceder las ayudas. Hasta ahora, se calculaba en función del Iprem (que está cifrado en 7.455 euros al año), estableciendo como límite máximo 2,5 veces este indicador para conceder las ayudas. En la nueva convocatoria que expira mañana la suma de los ingresos de todos los miembros que convivan con el solicitante no podrá superar lo que se denomina Cuantía del Límite de Ingresos de la Unidad de Convivencia, referida al año 2014.

Esta cuantía varía dependiendo del número de miembros que la componen y sus edades, y tiene un complejísimo cálculo . Tanto, que ha propia consejería dedica un apartado a detallarlo. Según estas explicaciones, es necesario sumar los ingresos obtenidos por los miembros de la familia en el año 2014 y multiplicarlos por un coeficiente de ponderación establecido entre 1 y 0,7 dependiendo de si es familia numerosa y tiene dependientes o discapacitados a su cargo.