Las cuentas pendientes entre Luis Salvador y el diputado de Granada al que ha obligado a dimitir

Este martes dimitía de su cargo Mariano Lorente , diputado provincial del PSOE que está siendo investigado judicialmente por presunta prevaricación relacionada con supuestas contrataciones irregulares realizadas cuando era alcalde de Iznalloz . Esta dimisión había sido exigida como condición indispensable por Ciudadanos para apoyar al candidato del PSOE, Francisco Cuenca, como alcalde de Granada.

Mariano Lorente dimitía «voluntariamente » como diputado responsable del área de Deportes y Administración Electrónica de la Diputación Provincial y sus palabras eran más que reveladoras: «Considero injusta esa condición de Ciudadanos (...) Pero no voy a ser un obstáculo , y mucho menos la excusa, para mantener en el gobierno municipal a quienes están bajo sospecha por una supuesta trama de corrupción».

Sin embargo, no quiso ir más allá ni abundar en el pasado. Pero hay más.

Se da la circunstancia de que el líder provincial de Ciudadanos es Luis Salvador , un histórico del PSOE que cambió de partido cuando el de Albert Rivera empezó a implantarse en Andalucía. Es más, hay quien dice que Salvador ha forjado una magnífica relación con el líder nacional de Ciudadanos.

Luis Salvador también tuvo aspiraciones en el PSOE. En el año 2012 se presentó como candidato a la Secretaría General del PSOE de Granada y el entonces secretario general de la agrupación de Iznalloz, Mariano Lorente, fue uno de sus principales apoyos para enfrentarse a Teresa Jiménez , la otra candidata...Hasta que Mariano Lorente cambió de opinión y dio su apoyo y el de su agrupación a Teresa Jiménez, quien ganó el congreso y es la Secretaria General del PSOE de Granada desde entonces.

Esa «traición» supuso un antes y un después para Luis Salvador quien abandonó el PSOE por graves discrepancias.

Ahora Luis Salvador es el líder de Ciudadanos , el candidato de la formación al Congreso y el hombre con el poder suficiente como para obligar a dimitir a quien cambió de opinión.