Salud rectifica y permite salir de las residencias a los ancianos no contagiados por Covid-19

A partir de ahora podrán salir de las residencias las personas que permanezcan estables y sin síntomas asociados al Covid-19 y que quieran volver de forma voluntaria al domicilio familiar una vez realizada una prueba diagnóstica que confirme que no están infectadas. Esta prueba podrá ser bien un PCR que tenga un resultado negativo, o bien un test rápido que detecte anticuerpos contra el virus.

Evidentemente, los ancianos no podrán trasladarse a domicilios en los que haya casos positivos por coronavirus y deberán tener tanto un documento firmado por sus familiares haciéndose cargo de ellos como por la dirección del centro en el que residen. También se recomienda que guarden un a islamiento de 14 días en esos domicilios familiares , como sucede con el resto de personas que, por causas justificadas, se trasladan de sitio.

Hay un asunto importante a tener en cuenta. Si los ancianos se ponen enfermos durante la estancia en su domicilio familiar no podrán volver a la residencia hasta su total cura para evitar los contagios con el resto de residentes y el personal que los atiende. La salida del centro residencial será voluntaria y temporal y deberán volver al mismo en un plazo máximo de 14 días una vez que finalice el período de confinamiento y si se comprueba que los ancianos no están contagiados. La familia también deberá garantizar que se van a mantener las medidas de prevención establecidas para el resto de la población y avisar al sistema sanitario si aparecen síntomas respiratorios.

El cambio de criterio del director general de Salud Pública se produce después de recibir numerosas quejas de los familiares que querían sacar de las residencias a sus mayores que viven habitualmente en ellas. No sólo porque el confinamiento estaba siendo mucho más duro para estos mayores sino, sobre todo, porque las residencias son uno de los principales focos de la pandemia.

Y precisamente esos son los motivos que arguye José María de Torres Medina para modificar su criterio. Según consta textualmente en la instrucción que ha enviado a todas las residencias de Andalucía y a los centros de Atención Primaria, que son los que tienen ahora la competencia sobre las mismas, «el aislamiento social por la ausencia de visitas de sus familiares y de contacto con otros residentes está dando lugar a situaciones de estrés y a un aumento del riesgo de situaciones que provocan un deterioro emocional de las personas y un incremento del deterioro para su salud física y mental ». Por ello considera que el beneficio potencial de esta decisión para estas personas con gran fragilidad «se espera que sea enorme».

La Consejería de Igualdad será ahora la que tenga que establecer las disposiciones pertinentes para aclarar la reserva de plazas, la exención del pago en las residencias privadas (el 80% de las 1.033 que existen en Andalucía) y también la casuística que pueda surgir.

La Consejería de Igualdad y el Servicio Andaluz de Empleo, SAE, ha puesto en marcha un sistema telemático para agilizar la contratación de personal destinado a trabajar en las residencias de mayores debido a las necesidades urgentes en las mismas. Así, el proceso de selección será telemático y la presentación de las ofertas de trabajo y los contratos también se harán por esos medios. En cada provincia hay una dirección de correo específica para agilizar la contratación en este sector porque las oficinas del SAE permanecen cerradas.