Pero como en un sueño, que se volvió pesadilla, la historia se ha vuelto a repetir hoy y en torno a las 6 de la mañana, cuando la Blanca Paloma llevaba tan solo tres horas de procesión por la aldea uno de los bancos que sostienen las andas cedía , según los hombres que se encontraban trabajando bajo el paso en esos instantes. En un momento dado, la unión del banco ha cedido y se ha desprendido, obligando de nuevo a la Señora a volver sobre sus pasos de nuevo a la ermita en las marismas. La salida fue a las 3:13 y a antes de la 6:30 se encontraba de nuevo en el Santuario.
En 2011 fue alrededor de las 8:00 cuando cedió el varal delantero derecho y la Hermandad Matriz decidió regresar al templo, ante la posibilidad de que el varal pudiera romperse del todo, causando con ello una incidencia mayor.
La rotura se produjo en la calle del Real, a altura de la casa de las camaristas, y es que ya al llegar a Carrión de los Céspedes y su recorrido por esta plaza fue incesante el número de veces que el paso de la Virgen tocó el suelo. Esto previsiblemente pudo originar el desprendimiento del varal del techo de palio. Los almonteños intentaron sujetar el varal con varios pañuelos, pero finalmente la Hermandad Matriz decidió que lo más conveniente era el regreso a la ermita.
Una vez de vuelta se decidió suspender definitivamente la procesión. Y al igual que esta mañana, la Hermandad Matriz invitó a las hermandades filiales a pasar por el Santuario con sus Simpecados para rezar ante la Blanca Paloma.
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