Cada día son agredidos, amenazados o insultados cuatro profesionales del Servicio Andaluz de Salud

Andalucía reduce la tasa de agresiones a profesionales sanitarios en 2022 respecto a 2019

Concentración de sanitarios en protesta por la agresión a un médico de Córdoba en 2020 VALERIO MERINO

Sevilla

07/02/2023
Actualizado 08/02/2023 a las 08:14h.

Un diagnóstico que no se acepta, una negativa a firmar recetas o a conceder una baja laboral, una espera demasiado larga o una consulta que no convence. El más mínimo desencuentro puede hacer saltar la chispa entre el paciente –si es de mecha corta– y ... el facultativo, y desatar una tormenta en forma de gritos, insultos, amenazas o empujones. Cada día cuatro profesionales del Servicio Andaluz de Salud (SAS) sufren un ataque de este tipo en su puesto de trabajo. Durante el año 2022, el registro de agresiones del SAS contabilizó 1.494 episodios. Para conocer su alcance, hay que poner la cifra en contexto con las de años anteriores. Son un 23,6% más de los 1.208 sanitarios agredidos en 2021, cuando la afluencia a los hospitales y centros de salud aún estaba condicionada por la pandemia. Pero menos de los 1.507 casos que se contabilizaron en 2019, antes de la irrupción del coronavirus.

La diferencia es que el pasado año trabajaban en el SAS casi 30.000 profesionales más. Por esta razón, el SAS destaca que la situación ha registrado una leve mejoría. La tasa de agresiones por cada mil profesionales ha caído del 14,6 al 12,32 entre 2019 y 2022.

De las 1.494 conductas violentas registradas, 259 fueron físicas, 30 menos que en 2019, y 1.235 no, sobre todo verbales. Alrededor del 18% de las agresiones sufridas por sanitarios son físicas y en el caso del personal de gestión y servicios, el porcentaje es del 14,86%. El 78,38% de las agresiones registradas entre enero y diciembre 2022 se producen entre el personal sanitario, y el 21,61% en personal encargados de la gestión y otros servicios, detalla el SAS en una nota de prensa.

Por provincias, Sevilla (304) Málaga (268), y Cádiz (259) se llevan la palma. Estas tres provincias acumulan el 55,62% de todas las agresiones recogidas en el SAS en este periodo. Jaén (122) y Córdoba (133) son las provincias donde menos agresiones se han registrado. Todos estos datos y más detalles sobre agresiones se han trasladado a los sindicatos en una mesa técnica específica que se celebró este martes. En el mes de noviembre la agencia pública comunicó a las organizaciones sindicales las agresiones de usuarios con trastorno psiquiátrico o psicológico o de aquellos que sufren algún tipo deterioro cognitivo, que se computan de forma diferenciada.

Más de dos tercios de las agresiones las sufrieron mujeres

Las mujeres son las que más sufren esta lacra. Del total de agresiones al personal sanitario, nada menos que el 73,27% (858) las sufrieron las profesionales. En el caso del personal de gestión y servicios, el porcentaje baja al 64,08%, aunque representa a 207 mujeres.

Por provincias, Sevilla (304) Málaga (268), y Cádiz (259) son las provincias más pobladas donde hay mayor número de agresiones. Estas tres provincias acumulan el 55,62% de todas las agresiones recogidas en el SAS en este periodo. Jaén (122) y Córdoba (133) son las provincias donde menos agresiones se han registrado. Todos estos datos y más detalles sobre agresiones se han trasladado a los sindicatos en una mesa técnica específica que se ha celebrado hoy.

Como novedad, el SAS puso en marcha un programa especial de acompañamiento al agredido, que es atendido como un profesional que lo asesora en los trámites y le brinda apoyo.

Además, se le facilita atención psicológica. Desde el SAS señalan que han reforzado las medidas de seguridad en los centros sanitarios y quieren mejorar la coordinación entre los cuerpos policiales, los interlocutores sanitarios, los directivos de los centros y las asesorías jurídicas provinciales.

El botón del pánico

Actualmente, los centros sanitarios andaluces cuentan con más de 45.000 elementos de seguridad de distinto tipo: cámaras de seguridad, timbres en consulta, consultas comunicadas con interfonos, teléfonos en consultas, salidas alternativas o terminales en puestos de trabajo en consultas con el software antipánico instalado.

Desde el Sindicato de Enfermería, Satse, lamenta que «se mantiene la lacra de la violencia contra el personal sanitario» y reclama al SAS un cambio normativo que establezca un régimen de sanciones económicas acorde al daño que producen los usuarios incumplidores de la sanidad pública..