El PP-A no acerca a sus presupuestos para Andalucía a ninguno de los grupos de la oposición

El PP-A no ha incorporado enmiendas que supongan más gasto o cambios en políticas de gestión de tributos. Todas esas fueron rechazadas por el Consejo de Gobierno. Se ha limitado a acordar una medida simbólica para cada grupo. Con Adelante Andalucía ha pactado el incremento de 2 millones de euros para el personal de los Personal Técnico de Integración Social (PTIS) y 300.000 euros para la apertura de consultas médicas por las tardes. Con la coalición Con Andalucía ha pactado destinar 190.000 euros a iniciar los trámites para un nuevo sello turístico; a Vox le ha concedido más dinero también para los PTIS y la realización de estudios sobre rebajas fiscales. Y respecto al PSOE, sólo se han aceptado dos enmiendas entre las que destaca el aumento de recursos para la atención temprana.

Toda la oposición denunció en el inicio de la sesión de aprobación del Presupuesto en el Parlamento la «falta de diálogo» y acusó al PP de actuar como «un rodillo» con su mayoría absoluta. El PP-A, sin embargo, defendió su apuesta por la «vía andaluza» de diálogo, entendimiento y consensos. Aunque poniendo límites, como señaló el portavoz popular, Toni Martín: «Se puede discutir, se puede dialogar, pero no vamos a aceptar ni una sola enmienda que suponga subirle los impuestos a los andaluces. Nuestro compromiso es el contrario. Vamos a seguir bajando los impuestos. Tampoco aceptamos enmiendas que impliquen un mayor endeudamiento o todas las que se han presentado con errores. Han pedido más dinero para sanidad o educación cuando estos presupuesto son los que más dinero destinan a estas áreas y los más sociales que ha tenido Andalucía».

Desde el PSOE-A, su portavoz y presidente de la Comisión de Economía, Hacienda y Fondos Europeos, Gaspar Llanes, criticó que «son unos presupuestos malos para Andalucía» y llamó la atención sobre la falta de respuesta por parte del Gobierno al trabajo realizado no sólo por los grupos políticos sino por todos los agentes sociales y económicos que han participado en la comisión elaborando propuestas: «No se ha incorporado ni una sola». Sólo se han transaccionado dos de las propuestas socialistas.

Vox formuló un total de 672 enmiendas al presupuesto para medidas fiscales o revisiones en políticas de gasto. Desde el Grupo Parlamentario lamentaron que se hayan aceptado sólo once enmiendas y ninguna de especial relevancia económica. «Cuando hablan de consenso y de acuerdo, lo del PP son sólo palabras», apuntaron desde la formación.

En cuanto a los dos grupos de la izquierda, la portavoz de Con Andalucía, Inmaculada Nieto, lamentó la falta de respuesta a las propuestas que se han registrado y el rechazo a medidas «sin justificación» como la creación de una tasa turística en Andalucía: «Supondría una escasa aportación para los visitantes a Andalucía y sin embargo una gran fuente de ingresos para los ayuntamientos». José Ignacio García de Adelante Andalucía, se expresó en términos similares. Aunque agradeciendo el tono del PP, incidió en que el Grupo Parlamentario «no ha negociado con los grupos de la oposición y se ha limitado a practicar un rodillo, sin diálogo y sin interés en mejorar con propuestas de la oposición».

El proyecto de presupuesto para 2024 es el mayor que ha tenido la Junta de Andalucía hasta el momento con un volumen de 46.753 millones de euros. Son las mayores cuentas que va a tener este año una administración en todo el territorio español y de ahí que su aprobación en tiempo y forma fuera clave para que el Gobierno autonómico pudiera trasladar el mensaje de estabilidad y la imagen de «locomotora nacional» en términos económicos y de creación de empleo. Sin embargo, desde su aprobación el pasado mes de octubre en el Consejo de Gobierno, la Junta de Andalucía ha tenido que afrontar la publicación de una batería de indicadores que ayer fueron trasladados al Pleno del Parlamento por parte de la oposición. El más reciente, la situación de la comunidad de nuevo a la cola en PIB per cápita a nivel nacional y con un crecimiento por debajo de la media. Pero antes llegaron las listas de espera, el informe PISA de educación, los últimos datos de desempleo o la estadística sobre las poblaciones y barrios con rentas más bajas. PSOE, Vox, Con Andalucía y Adelante Andalucía coincidieron en señalar que la comunidad está lejos de la convergencia con el resto .

El portavoz del PP-A, Toni Martín, fue el encargado de responder a todas estas afirmaciones: «Si sale un dato que no es bueno parece que es el único al que hay que atender, pero si se mira la evolución del PIB en los últimos años nos estamos acercando a la convergencia», apuntó el parlamentario quien enumeró otros «indicadores positivos para Andalucía como la creación de empleo, los afiliados a la Seguridad Social, el número de profesionales autónomos, el número de empresas, las exportaciones, la reducción de la tasa de abandono escolar o la reducción de los indicadores de pobreza por encima de la media nacional». «Cuando gobernaba el PSOE sí que Andalucía era la última. Vamos a seguir adelante con los mejores y más sociales presupuestos», concluyó Martín quien hizo una referencia a las mareas blancas que marcaron el final de la legislatura de Susana Díaz.

Sin embargo, ayer, en el Pleno del debate sobre presupuestos tanto la marea blanca por la sanidad como la marea verde vinculada a las condiciones de la educación pública volvieron a las puertas del Parlamento. Todos los grupos hicieron referencia a la convocatoria de la movilización a las puertas del Parlamento. Precisamente, sobre educación y sanidad versaron la mayor parte de las enmiendas y de las propuestas de agentes sociales económicos que finalmente no fueron incorporadas al proyecto de ley.