Albert Rivera se esconde de la prensa en Málaga tras su salida de Martínez-Echevarría

La convocatoria enviada a los medios de comunicación esta semana decía que Albert Rivera y Eduardo Madina se iban a dar cita para mantener un diálogo sobre en el que analizar la actual situación económica y política de España, así como los desafíos a los que se enfrentan las empresas y los profesionales en un mundo postpandemia.

Los medios estuvieron en el lugar citado a la hora indicada, pero no se les dejo pasar. «Normalmente siempre dejamos que se cubran nuestros eventos, pero hoy no quieren» , ha indicado un responsable de comunicación enfundado en un traje azul con corbata verde. Era la última negativa a los periodistas. «Quedamos en que nosotros mandábamos la nota de prensa y las fotos», había señalado antes una empleada de protocolo a ABC.

Los fotógrafos entraron, hicieron alguna foto antes de que comenzaran el coloquio y fueron desalojados. Los redactores no tuvieron acceso . Así no hubo forma de contar de qué iba la charla, como tampoco cómo va la disputa entre Rivera y Martínez-Echevarría , que es uno de los principales despachos de abogados de Andalucía.

El mes pasado, Albert Rivera comunicó al despacho que dejaba el bufete, en el que ingresó en 2020 después del batacazo electoral de Ciudadanos en 2019. Dos años después la renuncia de Rivera y su mano derecha, José Manuel Villegas, también su lugarteniente en Ciudadanos, comunicaron por correo electrónico a la dirección su renuncia.

Esa salida se produjo antes de que terminaran los años de contrato que firmaron cuando ingresaron. Se marcharon antes de que expirase su acuerdo, además exigiendo al despacho el dinero de ese contrato hasta 2025 . «Si tienen algo que reclamar, que lo hagan en los tribunales y no en la prensa», señalaron desde el bufete como contestación al órdago lanzado por Rivera despacho dirigido en España, Portugal y Turquía por Vicente Morató.

Y con un cruce acusaciones sobre productividad, rendimientos y posibles incumplimientos, se evidenció el divorcio, a la espera de una respuesta de Rivera y Villegas llevando al bufete a los tribunales. Algo por lo que se le podía haber preguntado en Málaga este jueves, si no se hubiera escudado con su acompañante en un equipo de protocolo para echar a la prensa del hotel donde iba a dar una conferencia .