Una plantación de 5.000 metros cuadrados de marihuana en el Parque Nacional Sierra de las Nieves

El pasado mes de octubre, los guardias civiles lograron localizar los cultivos, que ocupaban una extensión de 5.000 metros cuadrados y cuyo acceso era casi inaccesible. Según la Guardia Civil, para llegar a la misma había que atravesar numerosos senderos escarpados y cortafuegos en la montaña.

La plantación contaba con un sofisticado sistema de riego que derivaba ilegalmente el agua, que era extraída de un río, hasta una balsa de 6.000 litros de capacidad. La balsa había sido fabricada por los traficantes para poder regar la plantación.

La zona de cultivo de la droga contaba con dos zonas principales totalmente estructuradas. El suelo de toda la zona había sido transformados mediante la tala de árboles y el corte de la vegetación, así como de especies arbustivas autóctonas existentes.

Una de las partes era dedicada al cultivo en hilera de las plantas y la otra era utilizada para el proceso de secado de la marihuana. Debido al difícil acceso a la plantación, fue necesaria la participación del helicóptero del Servicio Aéreo y del Grupo de Rescate e Intervención en Montaña de la Guardia Civil.

También participó un grupo de bomberos forestales especialistas del dispositivo Infoca de la Junta de Andalucía. Éstos últimos llevaron a cabo la limpieza de la zona, debido al elevado peligro de incendio forestal por los materiales inflamables que se encontraban en plantación.

Los agentes procedieron a la detención de un individuo de nacionalidad rumana, que poseía una pistola municionada y que era el responsable del cultivo de la droga. Esta persona fue puesta a disposición del Juzgado de Instrucción de Marbella por la supuesta comisión de un delito contra la salud pública y de tenencia ilícita de armas. Ingresó en prisión.